Capítulo 6:
-Sungmin, enserio, tengo que explicarte algo, pero no quiero que te molestes –cambió su semblante por uno más serio
El rosado dio un suspiro
-Está bien
Kyuhyun le explicó que quería llevar a Miinah al departamento, para cenar
- ¡NO! ¡No puedes traerla! – gritó
- ¿Por qué? – Kyu necesitaba una razón, aunque ya sabía cuál era
- No eres de fiar
- ¿Qué?
- Lo que oíste he dicho que no
- Celoso – murmuró Kyu
- ¡¡Cállate!!
- La voy a traer y punto – se metió a la habitación de Sungmin y cerró la puerta con
seguro
- ¡Abre! – pidió Sungmin -¡Abre la maldita puerta!
- No hasta que me dejes traerla
- ¡NO! – gritó
Kyuhyun recorrió con la vista toda la habitación, encontrándose con un conejo rosado, sabiendo de antemano que su hermano se lo había regalado.
- ¡Qué bonito conejo!, sería una pena que le pasara algo
- ¡Ni se te ocurra! – Sungmin quedó histérico
- No sé…puede sufrir un accidente – dijo con sarcasmo
- ¡Está bien!, tráela, pero dame a mi conejo – dijo Sungmin, Kyu abrió la puerta y
el mayor le arrebató dicho peluche
- Pareces una niña llorona – se burló Kyu
Sungmin le sacó la lengua tiernamente mientras abrazaba a su conejo
Kyuhyun lo tomó de la barbilla, haciendo que sus miradas se encontraran provocando un leve sonrojo en el bajito.
-Eres adorable – dijo para después besarlo, Sungmin no se opuso, fue un beso lento, suave, dulce; lo acorraló en la pared, continuaron besándose hasta que el aire comenzó a hacerles falta, se separaron - Tómalo como un agradecimiento – dijo Kyu y se metió a su habitación
Sungmin quedó perplejo, nunca se imaginó que Kyu podía tener una faceta tierna
-De…nada – susurró mientras se tocaba los labios
La hora de la cena llegó, Kyuhyun fue a buscar a Miinah, Sungmin puso la mesa mientras que Eunhyuk le ayudaba un poco.
- ¿Qué hiciste para cenar? – preguntó mientras lo abrazaba por la cintura
- Sorpresa – se volteó para darle un dulce beso
- Dime…¿qué hizo Kyu para que aceptaras? – interrogó
- Quería matar al conejito que me regalaste – hizo un puchero
- Ash, que malo ¿seguro que no hizo nada más? – volvió a preguntar, necesitaba
aclarar las dudas que tenía en la cabeza, pues últimamente se le hacía muy extraño que Kyuhyun mirara tanto a su conejito
Sungmin recordó el beso, pero rápidamente dijo…
- No hizo nada más monito – respondió - No sé porque lo preguntas
- Curiosidad – volvió a besarlo, pero ésta vez posesivamente - Eres solo mío – le dijo al oído
- Claro que sí, Eun – al rosado se le hacía raro que su novio lo interrogara tanto
Eunhyuk se encontraba entretenido besando el cuello de Sungmin hasta que…
- Ejem – carraspeó Kyuhyun
- P-perdón – se disculpó un avergonzado Min
La cena era algo tensa para Kyu pues su hermano y su “cuñado” no paraban de besarse.
Le incomodaba mucho y no quería saber el porqué.
Miinah se dio cuenta de cómo Kyu no despegaba su mirada de Sungmin
- Kyu, ¿podemos salir un rato? – dijo Miinah disimulando su enojo
- P-pero
- Vamos – lo jaló, ambos salieron al balcón del departamento - ¡Ahora mismo me vas a
explicar qué demonios te pasa con mi primo!
- ¿De qué hablas? – no se esperaba tal reclamo
- Kyu ¿te gusta Sungmin? ¿verdad? – preguntó la chica
- ¡¡No!! ¡¡Que cosas dices!! Además solo me gustas tú – dijo sensualmente, tratando
de distraer a la chica
- Entonces ¿por qué lo ves así?
- Porque siempre me ha caído mal, por haberse robado a mi hermano, por haberse
metido entre nosotros, entre nuestra pequeña familia – dijo con recelo, en parte era verdad pues al principio odiaba a Sungmin por “arrebatarle” a su hermano ya que ambos eran huérfanos y eran el uno para el otro, pero ahora todo había cambiado, desde que empezó a “convivir” y “llevarse” con el conejo
- Kyu, si lo conocieras, no dirías eso – defendió a Sungmin
- Odio a las personas tiernas y melosas como él
- ¡Ya! Ni se te ocurra tocarle un pelo – advirtió
- “Ya toqué más que eso”–pensó Kyu - Ajá – respondió de mala gana
- Él, es como un hermano para mí
- Sí, si lo que digas, vamos adentro – dijo Kyu evadiendo el tema
- ¡Eun! ¡más rápido! – se escuchaban los gemidos del conejo, por todo el
departamento
- Lamento que tengas que escuchar esto – se disculpó Kyuhyun, le molestaba no ser el causante de los gemidos de Sungmin, de no ser el que esté acariciando, besando, mordiendo su cuerpo
- Tranquilo, tienen derecho a estar juntos – justificó la muchacha - Y nosotros igual –dijo lujuriosamente
- Me parece una buena idea – ambos se fueron del departamento con rumbo desconocido
*Al otro día*
Kyu se encontraba en la cocina, desayunando de lo más tranquilo, ya que no iría a trabajar pues le daba flojera y prefería dejarle todo al pobre de Eunhyuk; en eso apareció Sungmin caminando de forma extraña
- Eso te pasa por andar haciéndolo como loco – se burló el menor
- ¡Cállate! ¡No estoy de humor! – cortó
- Uuuy la señorita está en sus días – continuaba burlándose
- Auch, no puedo ni sentarme – se quejó en voz baja, para que Kyu no lo escuchara, pero para su mala suerte si lo hizo
- ¡Jajajajaja! – estalló en risas
- Minnie, lo siento, pero es que tú…
- Está bien monito, ya vete a trabajar, se te hace tarde – como pudo lo acompañó a
la puerta, una vez que Eunhyuk se fue…
- ¿No vas a cocinar? – preguntó Kyuhyun al ver que Sungmin subía por las escaleras
- No, ve que comes – cortó el mayor, al llegar a su habitación se acostó en la cama y al poco rato quedó dormido
Kyuhyun entró sigilosamente a la habitación y se acercó al rosado, comenzó a observarlo, sintiéndose atraído por esos labios que siempre invitaban a ser besados, por ese cuerpo que había sido suyo.
-“¿Qué demonios siento por ti?” – se preguntó mientras que acariciaba con suavidad la mejilla de Sungmin, no pudo aguantar más las ganas y lo besó de la manera más tierna que pudo, se separó de él y salió de la habitación
Continuará...
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