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Mr. Handsome & Mr. Cute
Mr. Handsome & Mr. Cute
-Tu casa es muy linda – exclamó Seungkwan apenas estuvo
frente al hogar de Vernon.
-Lo sé, todo gracias a mi madre – dijo orgulloso.
[Flashback]
Acababan de terminar de cenar en aquel café cuando
Seungkwan salió con una pregunta que dejó un poco desubicado a Vernon.
-¿Puedo ir a tu casa?
-¿A mi casa? – preguntó.
-¡Sí! Seguramente tienes muchas más fotos y quiero
verlas.
-P-pero–
-Si hay problema por tus padres–
-No, no es eso… es que… - se quedó en silencio. No sabía
qué decir, en su mente sólo cruzaban imágenes de lo que podrían hacer Seungkwan y él solos en su habitación.
-¿Vernon? – Seungkwan pasó una mano frente al rostro del
chico, quien se encontraba perdido en su mundo.
-Sorry. Está bien – se levantó de la mesa.
-¿A dónde vas?
-Vamos querrás decir – sonrió.
Seungkwan sonrió de oreja a oreja, le tomó de la mano y
ambos salieron felices del café. Parecía que llevaban años de noviazgo.
[Fin del flashback]
-¿En dónde andabas jovencito? – fue lo primero que les
recibió apenas entraron.
-Sofi – exclamó Vernon con sorpresa.
-¡Tienes una hermanita! Hola, soy Seungkwan – saludó sin
pena.
-Hola – dijo la chica.
-Sofi él… vino a ver mi colección de fotos – explicó
Vernon, no sabía cómo presentarlo.
-¿Colección? ¿Qué colección? – preguntó la chica.
Vernon le hizo ojos para que le siguiera la corriente.
-¡Ah, sí! La colección – “compuso” tras entender la
indirecta.
-Sí, bueno, bye – tomó la mano de Seungkwan y ambos
subieron a la habitación del menor.
-¿Crees que sean novios? – preguntó Sofía a su madre, la
cual había escuchado todo desde la cocina.
-Posiblemente – respondió la mujer -Espero que no hagan
cosas allá arriba.
-¡Mamá!
-¡Sofía! – burló la señora -Ven a ayudarme a secar los
platos.
❤ 🎾 📷 ❤
-¿Seungkwan? – exclamó Vernon algo “asustado” ya que
apenas habían entrado a la habitación, Seungkwan le había acorralado entre la
puerta y su cuerpo.
-Sé que no tienes ninguna colección – sonrió
malévolamente -Sólo quería pasar un rato contigo.
-P-ero están mis papás y Sofía, no podemos–
-¿Quién dijo que haríamos algo? – Seungkwan se separó y
se dirigió a la silla frente al escritorio de Vernon.
-¿No…? – exclamó algo decepcionado.
-No.
-¿Entonces?
-Ya te dije, quería pasar un rato contigo, platicar –
Seungkwan jugaba con un bolígrafo que había sobre el escritorio.
Vernon bufó, le arrebató el bolígrafo y le tomó de la
barbilla.
-Me quedo solo todos los días por la mañana – dijo antes
de besarlo profundamente. Seungkwan correspondió levantándose de la silla,
dirigiendo a Vernon hacia la cama.
-Eso suena muy interesante – sonrió y volvió a besarlo.
Vernon intercambió las posiciones y ahora Seungkwan se
encontraba debajo de su cuerpo; ambos se besaban como si no hubiera un mañana.
Seungkwan metió una mano por debajo de la camisa de Vernon, el cual se
sobresaltó al sentir algo suave acariciar su espalda; tuvo que juntar toda su
fuerza de voluntad para separarse un poco de él.
-Lo siento – dijo Seungkwan.
-No te preocupes – dijo en tono suave y tranquilo para después
acurrucarlo en su regazo -Qué loca ha estado esta semana. Apenas te conocí el
sábado pasado.
-Y ya me estás besando – agregó el otro, sonriente.
Vernon se sonrojó y soltó una risilla.
-Eres muy guapo, no pensé que si quiera notarías mi
presencia – confesó Seungkwan mientras recargaba la cabeza sobre el pecho de
Vernon.
-Yo pensé casi lo mismo.
-¿Casi?
-Sí, pensé: es muy lindo, nunca me hará caso.
-¡Aw! – chilló Seungkwan y luego le dio un beso en la
mejilla
Vernon soltó un largo suspiro y le abrazó con fuerza.
-Quiero estar así toda la vida – le susurró al oído.
-Te pasas de meloso – bufó Seungkwan para después darle
otro beso, pero esta vez en los labios.
En cuestión de minutos, ambos de quedaron dormidos.
❤
🎾 📷 ❤
-Mamá, ven aquí – susurró Sofía.
La señora, que estaba a punto de entrar a su habitación
se acercó a su hija.
-¿Qué haces espiando a tu– oh my god qué lindos – exclamó
en voz baja.
Sofía no paró de tomar fotos a aquella escena: Seungkwan
con la cabeza y la mano derecha sobre el pecho de Vernon y este rodeándolo con
ambos brazos.
-Te dije que eran novios – murmuró la chica.
-Ese chico sí que me gusta para yerno.
Continuará…
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