Capítulo 15: Sentimientos no tan ocultos
Las
horas pasaron y se hizo de noche. Mark acababa de llegar al departamento de
Donghyuck para llevarlo a su casa y hablar con sus padres.
-¿Estás
listo? – preguntó Mark apenas Donghyuck abrió la puerta.
-Sí
– respondió el menor quien recién había llegado del trabajo y no tuvo tiempo de
cambiarse el uniforme.
-Vamos
– indicó Mark.
Durante
el camino, ambos permanecieron en silencio; Mark moría por preguntar a
Donghyuck qué le había dicho su familia, pero el moreno se veía demasiado
ensimismado, así que no quería molestarlo.
-Mi
papá dice que conoce a los tuyos – comentó Donghyuck.
-¿Ah
sí? ¿Cómo se llama?
-John,
pero le dicen Johnny.
-Ya
veo – pausó; el único ex compañero que conocía era el “tío Taeil”, mejor amigo
de su papá Taeyong -¿Qué… te dijeron? – se atrevió a preguntar.
-Están
muy decepcionados de mí – Donghyuck suspiró con tristeza -Cometí el mismo error
de Seungkwan, mi hermano. Él igual se embarazó joven pero la diferencia es que
tenía una relación seria con mi cuñado, en cambio tú y yo… no somos nada.
-Pero
me estoy haciendo responsable del bebé, no te estoy dejando solo.
-¡Pensabas
darlo en adopción!
Mark
rodó los ojos.
-No
quiero discutir – amenazó.
-Al
final sólo pasarás una pensión y me dejarás solo con el paquete.
-Entiende,
no estaba en mis planes ser papá a los 19.
-¡Pues
parece que no pensaste en eso cuando decidiste metérmela!
Mark
frenó de golpe y estacionó el auto frente a un parque. Ambos se miraban
fijamente, estaban agitados por la discusión.
-Donghyuck—
El
menor interrumpió las palabras de Mark con un apasionado beso.
-No
– con dificultad, Mark separó al moreno de su cuerpo -No está bien.
-¿No
quieres? – Donghyuck arqueó una ceja.
-Acabamos
de discutir y ¿quieres hacerlo?
-Cállate
y disfruta el momento – se sentó sobre las piernas de Mark, comenzando a mover
las caderas, torturando al mayor.
-Donghyuck – Mark empezó a agitarse, el moreno
le besaba el cuello con dedicación -Estoy con Wendy.
Donghyuck
detuvo todos sus movimientos tras escuchar aquellas palabras.
-Apuesto
a que no le has dicho sobre esto – comentó con molestia mientras regresaba a su
asiento.
-Ya
lo hice y no quiero lastimarla más – puso en marcha el motor.
-Bueno,
tú te lo pierdes – se encogió de hombros.
Mark
prefirió ignorar sus palabras.
💞
[Horas después]
Tras
finalizar aquella conversación de dos horas con los padres de Donghyuck,
Taeyong y Doyoung decidieron tomar un momento para analizar todo lo platicado y
poder comunicar una decisión a los jóvenes, quienes estaban en la sala junto
con Lucas.
-Sigo
sin creer que Johnny sea el padre de Donghyuck – exclamó Doyoung, caminando de
un lado a otro de la habitación.
-Ni
yo – suspiró Taeyong, quien seguía sentado en la silla frente al escritorio en
donde se encontraba la computadora.
-O
sea, me acostaba con él en la universidad – agregó Doyoung.
-Pensándolo
bien, Lucas tiene un cierto parecido a él.
Doyoung
detuvo su nerviosa caminata y miró con el ceño fruncido a su esposo.
-Es
una broma – sonrió Taeyong mientras se ponía de pie -Vamos, hablemos con los
chicos.
-¿Alguna
vez llegaste a pensar que Lucas era de Johnny? – cuestionó Doyoung apenas
Taeyong abrió la puerta de la habitación.
-Jamás,
sabía que era mío.
Doyoung
no pudo evitar sonreír ante aquellas palabras. Luego de aquel romántico momento, se dirigieron a la
sala.
-¿Qué
pasó? – preguntó Mark apenas vio a sus padres ingresar al lugar.
-Primero
que nada, tuvimos que mentir acerca de la “relación” entre ustedes.
-¡¡¿Qué?!!
– exclamó Mark.
-Johnny
nos preguntó y tú papá y yo creímos apto que, para salvar TU trasero, lo mejor
era decirle que ustedes eran novios – reclamó Doyoung.
-P-pero
estoy con Wendy y—
-Basta
– intervino Taeyong quien rara vez reprendía a sus hijos, casi siempre era
Doyoung quien se encargaba de eso.
-Conocemos
a Johnny y si le decíamos que le pagabas a su hijo por tener sexo, era capaz de
volar a Corea y asesinarte con sus propias manos, ¿sí o no, Donghyuck? – dijo
Doyoung, a lo que el aludido asintió con la cabeza.
Mark
suspiró, derrotado.
-¿Entonces
qué decidieron? – preguntó Mark.
-Donghyuck
se quedará a vivir con nosotros durante el embarazo, pues necesitará cuidados y
ayuda – anunció Doyoung.
Mark
ahogó un grito de desesperación.
-¿Y
luego? ¿Qué pasará? – cuestionó Donghyuck.
-Se
decidirá si te quedas en Corea o te mudas a Estados Unidos – agregó Taeyong.
-Pero…
si me voy, el bebé crecerá lejos de ustedes – murmuró Donghyuck acariciando su
vientre.
-No
te preocupes, por el momento enfócate en el embarazo – Taeyong le palmeó el
hombro para tranquilizarlo.
-Bueno…
muchas gracias por su ayuda – dijo Donghyuck.
-Y
tú – Doyoung llamó a Mark, el cual estaba perdido en sus pensamientos -A partir
de la próxima semana, irás todos los fines de semana a trabajar a alguna de las
tiendas de ropa de tu tía.
-Pero
papá—
-Nada
de peros. He dicho – sentenció Doyoung.
-Hablando
de trabajos, ¿qué haré con el mío? – preguntó Donghyuck.
-No
te preocupes, trabajarás ahí hasta el tiempo adecuado – dijo Taeyong.
-Está
bien, muchas gracias – Donghyuck sonrió.
-Puedes
comenzar a traer tus cosas a partir de mañana, Mark y Lucas te ayudarán,
¿verdad? – advirtió Doyoung.
Ambos
chicos asintieron al mismo tiempo.
💞
Mientras
Taeyong y Doyoung preparaban la cena y Lucas y Donghyuck platicaban en el
comedor, Mark había ido a su habitación para hablar con Wendy; aquella llamada
había llegado en mal momento, así que mintió diciendo que era un compañero de
la escuela.
La
chica se disculpó por la manera en la que había reaccionado y Mark se disculpó
por haber ocultado algo tan delicado; le comentó la decisión de sus padres,
omitiendo la parte en la que inventaron que tenía una relación con Donghyuck.
-Te
juro que las cosas entre él y yo ya terminaron.
-Claro que no Mark, apenas están comenzando –
la chica tomó aire, intentando ahogar su llanto -Tendrán un hijo y eso siempre
te unirá a él.
-Pero
no de manera romántica – pausó -Wendy, por favor, no quiero perderte.
-Dame tiempo para pensarlo, ¿sí?
-Está
bien, pero prométeme que lo harás.
-Lo prometo.
-Entonces—
-Mark,
ya está lista la cena – la voz de Lucas, interrumpió sus palabras.
El
aludido asintió, Lucas salió de la habitación.
-Antes de que te vayas…
-Dime.
-Cuida de Donghyuck, no quieras desquitar en
él la molestia hacia ti mismo.
Mark
no supo qué contestar.
-Y me tomaré el tiempo necesario para procesar
todo esto, ¿está bien?
-Claro
que sí.
-Hasta pronto, Mark.
El
aludido sintió un escalofrío recorrer su espalda ante las palabras de la chica.
-Hasta
pronto—
Mark
estuvo a punto de agregar su habitual “te quiero” pero la joven ya había
finalizado la llamada. Melancólico, bajó al comedor; su mente estuvo ausente
durante casi toda la cena, su familia conversaba animadamente con Donghyuck y
eso sólo le irritaba.
-Iré
a dormir – se puso de pie.
-Espera,
te falta llevar a Donghyuck a su casa – dijo Doyoung.
Mark
apretó los puños cuando escuchó aquella orden, ¿qué sus papás no notaban que
quería estar solo?
-Yo
puedo llevarlo – dijo Lucas.
Mark
miró a su hermano, incrédulo.
-Les
acompañaré, sólo por compromiso – bufó Mark.
Luego
de que Donghyuck se despidió de los padres de Mark, partieron hacia el
condominio.
-Ahora
entiendo por qué te lo tirabas, es lindo y divertido – comentó Lucas.
-Cállate
– bufó Mark.
-¿Cuál
es el problema? Está dormido – se quejó el mayor mirando a Donghyuck por el
espejo retrovisor -Por lo visto, tu compañero de la escuela resultó ser Wendy,
¿verdad?
Mark
asintió.
-Me
dijo que le diera tiempo para pensar las cosas.
-Ustedes
dos están demasiado acostumbrados a estar juntos, no me extrañaría que
regresaran.
-No
quiero perderla – suspiró el menor.
-Bueno
pues si regresan, ¿te importaría que me acostara con Donghyuck?
-¿De
qué demonios estás hablando? – reclamó Mark -Además, está embarazado.
-¿Y?
Es temporal.
-¿Desde
cuándo te gustan los hombres?
-Alguien
como Donghyuck puede volver gay a cualquiera.
-Ya
cállate.
-Entonces,
¿eso es un sí?
-¡No!
– gritó Mark, despertando a Donghyuck.
-¿Qué
pasa? – preguntó moreno.
-Nada,
sólo estábamos platicando – se excusó Lucas.
Los
chicos llegaron al condominio, Lucas se ofreció a acompañar a Donghyuck hasta
su departamento, pero Mark se negó y dijo que él lo haría.
-Supongo
que tendrás que soportarme durante algunos meses en tu casa – comentó
Donghyuck.
-Sí,
eso me pasa por estúpido – bufó Mark.
-Tu
hermano es muy divertido, todo lo contrario a ti.
-Pero
tiene fama de casanova.
-Lo
sé, conozco a los de su tipo.
-Entonces…
hasta mañana.
-¿Podrías
venir como a las 7 de la noche? Es que a esa hora llego de trabajar.
Mark
asintió.
-Que
descanses – dijo Donghyuck.
-Sí,
igualmente.
Donghyuck
abrió la puerta del departamento y justamente cuando estaba por entrar, Mark le
tomó de la muñeca.
-¿Qué
pasa?
Mark
lo empujó hacia dentro del departamento y una vez que lo tuvo acorralado entre
la puerta y su cuerpo, lo besó apasionadamente.
-Ah…
dijiste que no querías – jadeó entre besos el moreno.
-Aprovecha
la oportunidad – Mark comenzó a desabrocharle el pantalón, a la vez que le
besaba el cuello.
-T-tu
hermano—
-Que
espere.
Se
dirigieron a la habitación del menor. Mark prácticamente lo lanzó a la cama
mientras se desabrochaba los pantalones y los bajaba junto con su ropa
interior. Donghyuck dilataba su entrada ante la hambrienta mirada del otro.
Mark
terminó de colocarse el condón que Donghyuck había “encontrado” en la
habitación de Jeno.
-¿Con
quién planeabas usarlo? – preguntó Mark mientras rozaba su miembro en la
entrada de Donghyuck.
-Con
nadie… hmn… quería burlarme de Jeno – jadeó.
Mark
comenzó a entrar con delicadeza, lo que menos quería era lastimar al moreno.
-Donghyuck
– llamó, el moreno le miró a los ojos.
Ambos
se besaron con dedicación, Mark aprovechó para terminar de entrar y proseguir a
mover las caderas, embistiendo a Donghyuck.
-Dime
que no está Jeno – pidió Mark.
-¿Por
qué?
-Quiero
escucharte gemir – arremetió con más fuerza contra el cuerpo del menor.
-¡Ah!
N-no… mmnh… hoy duerme en casa de un— ¡ah, ahí… Mark!
El
aludido golpeó aquel conocido punto, haciendo que Donghyuck terminara al poco
tiempo, pero él no lo había hecho, así que continuó embistiéndolo hasta quedar
satisfecho.
-Rápido
pero bueno – comentó Donghyuck mientras limpiaba su vientre -¿Es seguro hacerlo
en el embarazo?
-Según
recuerdo que sí, pero hasta cierto tiempo y con ciertas restricciones.
-¿Cómo
sabes?
-Yo
sí prestaba atención a mis clases – bufó Mark.
-Pues
espero que tu calentura, no le haga daño al bebé.
-¿Mi
calentura? Tú también querías.
Donghyuck
rodó los ojos.
-Ya
vete, estoy cansado y pegajoso.
-No
eres el único.
El
moreno lo empujó hasta la salida del departamento.
-Nos
vemos mañana – dijo Donghyuck cerrando la puerta una vez que Mark estuvo a
fuera.
💞
-Sabía
que no podrías mantener las piernas cerradas – dijo Lucas apenas Mark ingresó
al auto.
-Déjame
en paz.
-Lo
bueno es que no quieres nada con él –
murmuró el mayor.
Durante
todo el camino, Mark no pudo dejar de pensar en aquellas palabras.
Continuará…
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