8 de septiembre de 2013

Honey and Green Tea


Autora: Kang
Grupo: EXO
Pareja: ChanTao (Chanyeol x Tao)
Clasificación: +18
Advertencias: infidelidad, lemon, lenguaje obsceno.
Resumen:
1.- Nunca dejes a tu novio solo con tu mejor amigo.
2.- Nunca dejes algún afrodisíaco a la mano.




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Honey and Green Tea


-¿Llevas todas tus cosas? – preguntó Tao a su apurado novio, Kris.

-Sí, amor – cerró su maleta –Nos vemos el lunes – besó sus labios.

-No sé qué haré todo un fin de semana sin ti.

-Hm...¡se me había olvidado decirte! – exclamó.

-¿Qué pasa?

-Chanyeol tuvo una pelea con Baekhyun y ahora no tiene donde vivir.

-¿Y...? – suplicaba porque Kris no se haya ofrecido a darle posada. Chanyeol no le caí muy bien, sin embargo, lo aguantaba por ser el mejor amigo de su novio.

-Le dije que podría quedarse el fin de semana.

-Kris.

-Ya sé amor, pero, es como un hermano para mí, no puedo dejarlo solo en estos momentos.

-Pero...

-Diablos, se me hace tarde – comenzó a salir de la habitación –Chanyeol debe venir en dos horas. Haz lo posible por ser amable con él ¿si?

-Wu Yi Fan.

-Te lo recompensaré con todo el Gucci que quieras – sabía que con eso evitaría una semana sin sexo.

-Bien. Cuídate mucho. Te amo – le besó profundamente.

-No hagas eso. Sabes que me calienta.

-Ese es el punto – besó su cuello.

Kris tuvo que alejarse del cuerpo de su pareja para poder irse, sino, terminaría haciéndolo suyo ahí mismo.

-Te amo – dijo. Prácticamente huyó de la casa.






—•—






El reloj marcaba la 1 de la madrugada. Tao estaba más que aburrido. Cambiaba una y otra vez los canales de la televisión.

El timbre comenzó a sonar sin descanso.

-¡Ya voy! – gritó. Sabía perfectamente quién era –Hola, Chanyeol – dijo entre dientes.

-¡Hola, hola! Gracias por recibirme – entró a la casa.

-Sólo lo hago por Kris.

-Ya sé. Amm...¿qué hay para cenar? Muero de hambre – se dirigió a la cocina.

Tao tomó aire. Le indicó que había algo de pizza en el refrigerador.

-Me iré a dormir. La habitación de huéspedes está en el fondo del pasillo – explicó –Buenas noches y por favor, NO HAGAS RUIDO – ordenó.

-No te preocupes, descansa.

Tao asintió y subió a su habitación.







—•—







Chanyeol abrió el refrigerador y registró todo lo que había en él. Sacó la caja de pizza, una lata de Coca-Cola, pero, algo detrás de ésta llamó su atención.

-¡Miel! – gritó –Amo comer pizza con miel – dijo para sí mismo. Tomó aquel frasco entre sus manos y sin más, se dirigió a la sala.

Encendió la televisión y tras encontrar algo interesante para ver, comenzó a comer.

Estaba tan entretenido en la película que ni cuenta se había dado de que el volumen se encontraba al máximo, de que “Taoris” el cachorro de Tao y Kris se había comido los restos de pizza, de que ya eran más de las 3:00 am...hasta que, de la nada, la televisión se apagó.

-¡¿Qué mierda?! – exclamó.

-Al parecer no entiendes lo que significa silencio – dijo un Tao más ojeroso de lo normal y con cara de pocos amigos.

-Pero...pero...

-¡¿Le diste pizza a Taoris?! – gritó histéricamente.

-No, claro que... – cuando dirigió la mirada a su plato, éste se encontraba vacío.

-¡Lárgate a dormir! Yo limpiaré todo.

-P-puedo ayudarte.

-¡No! Desaparece de mi vista ahora mismo.

-D-de acuerdo. Lo siento – hizo una reverencia y se fue a la habitación de huéspedes.

Tao le insultó mentalmente. Comenzó a limpiar todo el desastre que Chanyeol había hecho.

Suplicaba porque Taoris no se enfermara, sino, se moriría. Era uno de los tantos regalos que Kris le dio cuando cumplieron 4 años de ser novios.

-Ahora entiendo por qué Baekhyun lo sacó de su departamento – bufó. Se dirigió a la cocina.

-¿Qué es esto? – se preguntó cuando vio un pequeño frasco de cristal sobre la meseta -¿Miel? – dijo después de haberlo olido -¿Por qué Kris compraría miel cuando ya tenemos? – metió al refrigerador dicho objeto y terminó de limpiar la sala.

Se preparó un poco de té verde que su novio le había traído de su último viaje a Japón.

-Ah...qué relajante – suspiró.

De pronto, alguien le abrazó por detrás.

-¿Q-qué...? ¡Chanyeol! ¡¿Qué te pasa?!

-Estoy muy... – con fuerza, le obligó a inclinarse un poco y restregó su excitado miembro en el trasero del otro, Tao soltó la taza que tenía entre manos impactándose contra el piso y haciéndose añicos en milésimas de segundo.

-¡Eres un cerdo! ¡Suéltame!

-N-no sé qué me pasa, sólo quiero hundirme en ti – le dijo al oído.

Tao comenzó a temblar. El teléfono estaba muy lejos y su casa se encontraba apartada de la sociedad. A ese paso, sería violado por el loco de Chanyeol.

-¡Suéltame! – volvió a suplicar.
Chanyeol lo pegó con fuerza al lavamanos; le besaba y mordía el cuello.

-Chan...yeol – Tao comenzaba a agitarse.

-Tú también quieres, no lo niegues – le acariciaba los pezones por sobre la ropa.

Tao se volteó y presionó sus labios contra los de Chanyeol. Éste comenzó a masajearle los glúteos con ambas manos.

Sus erecciones se rozaban a pesar de estar ocultas en sus respectivos pantalones.

-Sabes...sabes a miel – jadeó el pelinegro –Chanyeol, cógeme, cógeme ahora mismo.

Ante aquellas sucias palabras, el más alto, pegó aquel cuerpo a la fría puerta del refrigerador.

Tao se quitó la camisa y Chanyeol arremetió contra sus pezones. El pelinegro gemía constantemente.

Chanyeol subió hasta sus labios. Tao estaba desesperado, le desabrochó los pantalones y se los bajó junto con el bóxer. Se relamió los labios.

-Es por eso que Baekhyun y yo volvemos todo el tiempo – dijo tras ver la mirada de Tao sobre su miembro.

Chanyeol aprovechó la distracción de Tao para besarlo.

-¿Quieres hacerlo aquí? ¿O en la habitación de huéspedes? – preguntó el más alto.

-L-la habitación – Tao no podía hablar coherentemente ya que el castaño le lamía el cuello de una manera bastante sensual.

Ambos se dirigieron a dicho lugar. Chanyeol lanzó a Tao a la cama. Le quitó los pantalones y comenzó a masturbarlo.

-¿Tienen vaselina? – preguntó.

-N-no...no usamos eso – respondió sonrojado.

-Hm. Ya vuelvo – salió corriendo de la habitación.

Tao rodó los ojos. Estaba caliente y Chanyeol no hacía nada al respecto. Comenzó a acariciarse un pezón y masturbarse con la otra mano. Gemía constantemente. 

Chanyeol le observaba desde el marco de la puerta.

-Mierda. Ven ahora mismo, maldito idiota – ordenó Tao –Ven antes de que me corra.

-Vaya, vaya, no sabía que en el sexo te volvías todo un grosero.

-¿Qué trajiste?

-Miel. Está fría, pero es lo único que hay para no lastimarte.

-Ash. Deja de hablar y apúrate.

Chanyeol asintió. Abrió el frasco, introdujo un dedo y lo pasó por todo el pecho de Tao hasta llegar a su miembro.

-¿No se supone que lo debías poner en mi culo?

-Shh.

El castaño comenzó a limpiar con su lengua aquel camino de miel. Se detuvo un momento para jugar con el piercing en el ombligo de Tao.

Luego, sin que éste se diera cuenta, remojó otra vez dos dedos en la miel y comenzó a extenderla por su mano.

-¡Ah! – gimió el pelinegro. Chanyeol le estaba masturbando con la mano que tenía aquella sustancia dulce.

Tao se revolcaba en la cama. Nunca había hecho algo así con Kris.

Al poco tiempo, sintió cómo su entrada era mojada por aquel líquido.

-Pensé que tendría que hacérmelo sólo – dijo algo enojado.

-Demonios, qué quejoso eres.

Dicho eso, Chanyeol lo penetró de una sola estocada. Tocando el punto que enloquecía al pelinegro.

-Mierda. Eres un bruto.

-Lo sé – lo besó.

Sus lenguas se acariciaban, sus salivas se mezclaban, sus alientos se intercambiaban.

Se podía escuchar cómo sus carnes hacían fricción; todo gracias a la miel que Chanyeol había aplicado en Tao y en su propio miembro.

Ambos gemían como locos. Chanyeol ya se había venido en Tao, pero aun así continuaba penetrándolo.

-Mierda, Chanyeol ¿quieres partir en dos? – preguntó entre gemidos.

-Es que estás tan rico que no puedo evitar darte duro.

Tao cerró los ojos con fuerza y contrajo sus paredes; pronto, llegó al clímax y después, cayó sobre Chanyeol (ya que habían cambiado posiciones y él estaba sobre el castaño).

-Sí que eres bueno...a pesar de ser un idiota.

Chanyeol lo besó una vez más y dejó que Tao acomodara la cabeza en su pecho.

-No puedo creer que me acosté con el mejor amigo de mi novio – dijo.

-Kris no tiene porqué saberlo. Procuré no dejarte marcas.

-Sabes, creo que esa miel tenía algo.

-¿Por qué lo dices? – preguntó Chanyeol mientras jugaba con aquello negros cabellos.

-Porque...como que me dio más ganas.

-Tienes razón, luego de que la combiné con la pizza, se me paró y cuando te vi en la cocina me dieron ganas de fuckearte.

-Muero de sueño – bostezó ignorando las sucias palabras del castaño.

-Yo igual. Descansemos un rato. Mañana seguimos.

-¡¿Qué?! ¡No pienso volver a acostarme contigo!

-Lo sé, sólo bromeaba.







—•—







Lunes por la mañana...

Kris había vuelto de su viaje. Cuando abrió la puerta, se topó con un silencio sepulcral.

Dejó sus maletas y se dirigió a la cocina por un poco de café. El cambio de horario le estaba afectando.

En la puerta del refrigerador había una notita:

Amor, salí a trabajar. Hay pasta en el refrigerador, sólo necesitas calentarla. 

Nos vemos en la noche. Te amo.


Kris sonrió internamente. Abrió el refrigerador dispuesto a calentar la comida que su novio le había dejado.

-Se ve deliciosa – dijo. De pronto, su vista se dirigió al frasco semi-vacío -¿Qué...? Chanyeol...Tao. No. Demonios.

Se llevó ambas manos al rostro.

-¡Wu Yi Fan, eres un idiota! – gritó –No. Un momento. Siempre he querido hacer un trío...iré a comprar más, pero, primero, a comer la pasta que mi hermoso panda preparó.



Fin.


7 de septiembre de 2013

Black Tinkerbell


Autora: Kang
Grupo: EXO
Parejas: Baek!Yeol, BaeKai/KaiBaek.
Clasificación: +16
Advertencias: AU, drama.

Sin sentido (?).
Resumen:
“Después de que ella llegó, me convertí en el segundo. ¿Qué vas a hacer conmigo? Por favor, ámame.”


Basado en Black Tinkerbell
de Chocolat.




~•~~•~~•~



Black Tinkerbell


Mi nombre es Byun Baekhyun, tengo 22 años de edad y estoy enamorado de mi mejor amigo: Park Chanyeol. El idiota más grande que puede existir.

¿Que si él me ama?
No. No lo hace.
¿Por qué?

Porque tiene novia. Sandara Park, así se llama la bruja.

La odio con todo mí ser, no solamente por seducir a mi Chanyeol, sino por ser una zorra enfrente de él.

Le he dicho millones de veces que Sandara no es para él, que debería conseguirse a alguien más. Alguien que le ame profundamente, pero no me escucha. Soy un cero a la izquierda desde que ella llegó.





~•~





-Hola – saludé a la señora Park.

-Hola, Baek. Pasa, está en su habitación, pero toca antes porque está con su novia – me dijo algo avergonzada.

Con rabia, mordí mi labio inferior y sólo asentí. Comencé a subir las escaleras arrepintiéndome de haber ido a visitarlo, de haberme preocupado después de aquella llamada...

{Flahsback}

-¿Hola?

-¡Baek! ¡Tengo 39° de temperatura! ¿Qué hago?

-¿Ya hablaste con tu mamá? – dije intentado ocultar mi desesperación.

-No está en la casa.

Rápidamente salí de mi habitación y fui a la de mis padres. Interrogué a mi papá (ya que él es doctor) y una vez que me dio una lista de medicamentos para bajar la temperatura, le dije a Chanyeol.

-Gracias. ¿Podrías venir a visitarme mañana?

-¿Y tu novia? – pregunté con coraje.

-Hmm...no sé, tal vez trabajando.

-“Si, en el bar de mala muerte de donde la sacaste” – pensé –De acuerdo. Voy mañana. Cuídate mucho.

-¡Sipi! – colgó.

Por todos los cielos, cómo amaba que fuera tan infantil.

{Fin del flashback}

Estaba tan ensimismado que olvidé lo que su madre me había dicho y abrí la puerta de golpe. Mis ojos se humedecieron cuando me encontré a Chanyeol sobre Sandara, ambos se besaban y…tocaban.

Mierda. Mierda. ¡Mierda! Eso me pasa por ser tan idiota.

-Oh, Baek. Olvidé que venías – me dijo.

-No te preocupes. Creo que no me necesitas.

-Sí, no te necesita – me dijo la bruja mientras acomodaba sus ropas.

-Lo sé. Adiós – di la media vuelta esperando a que Chanyeol me dijera: “no te vayas” pero aquello nunca llegó. Al contrario, cerró la puerta tras mi espalda –Te odio… - susurré. Mi voz se quebraba y mis lágrimas salían sin parar.

Como pude, me despedí de la madre de Chanyeol. Corrí hasta mi casa. Necesitaba un abrazo de mi madre, pues sólo ella y Kai (amigo mío y de Chanyeol) sabían que estaba enamorado de ese estúpido.

-¿Baek? – escuché que me llamaban. Lentamente, levanté la mirada.

-Kai…

-¿Qué pasa? ¿Por qué lloras? – me preguntó. No quería contestarle, pues me dolía demasiado –Un momento, si vienes de esa dirección quiere decir que…

-Sí, fui a verlo. Fue lo peor que pude haber hecho.

Me abrazó. Demonios, cómo necesitaba esto. Enterré mi cabeza en su pecho. Lloraba con toda mis fuerzas. Me odiaba a mí mismo por amar tanto a alguien para quién soy invisible.





~•~





Kai me había acompañado a casa y mi madre insistió para que se quedara a cenar con nosotros.

-Baek, deberías olvidarte de él – me dijo una vez que estuvimos en mi habitación.

-Lo sé. Quiero hacerlo pero no puedo.

-Sí, sí puedes.

-Kai...

Él suspiró y se puso de pie. Me tomó de los hombros y me miró fijamente.

-Chanyeol ya no te necesita. Aléjate de él antes de que sea demasiado tarde.

-Pero...

-Por favor, Baek. Te lo suplico. No me gusta verte triste todo el tiempo. Extraño al tocino bromista que siempre se le pasaba jugando con el interruptor de luz del salón.

Reí ante sus palabras.

-Lo intentaré, te lo prometo.

Kai tenía razón, estar con Chanyeol significaba sufrir y yo ya estaba cansado de hacerlo.

-Gracias – besó mi frente. No pude evitar sonrojarme cuando hizo eso. Podía parecer un playboy por fuera, pero, por dentro era todo un niño.






~•~







Y así fueron transcurriendo los meses.

Me había alejado de Chanyeol. Muy pocas veces le veía en la escuela y ya no iba para nada a su casa. Él nunca hizo algo para contactarme, al contrario, se había encontrado otros amigos.

Últimamente me la pasaba con Kai. Aunque no imaginaba que mi tranquilidad se esfumaría muy pronto.

Kai y yo estábamos en los jardines traseros de la escuela cuando, de la nada, él me preguntó:

-¿Sabes besar?

-¿Qué?

-Que si sabes besar.

-N-no sé.

-Hmm...¿quieres que te enseñe?

-Jongin.

-Vamos, sólo un besito.

-Pero eres mi amigo y…

-Por favor – me puso ojos de perrito.

-Bien. Rápido. Tengo miedo de que nos vayan a ver.

-Nadie nos verá – su voz había cambiado. Ahora era más profunda y escalofriante.

Con suavidad, tomó mi barbilla y acercó sus labios a los míos.

-Relájate – pude sentir su aliento chocar contra mi rostro. Aquel olor a menta inundaba mis fosas nasales.

Cerré los ojos y al poco tiempo sentí sus labios contra los mío. Mi cuerpo tembló, no, se sacudió por completo.

Al poco rato, me olvidé de todo y acerqué a Jongin a mi cuerpo. Ambos caímos sobre el pasto. No me importó manchar el uniforme, no me importó estar besando a uno de mis mejores amigos, no me importó la existencia de Chanyeol. Sólo quería sentir...sentir cada vez más.

-¿Y? ¿Te gustó? – abrí lentamente los ojos. No sabía en qué momento había dejado de besarme.

-Me encantó – le sonreí.

-Bien. Ahora vamos a clases – me tendió una mano, la tomé. Nos quedamos viendo por algunos segundos, luego fuimos nos sonreímos y caminos con las manos entrelazadas hasta que llegamos al salón.

A la hora de salida, Kai tuvo que irse pues su mamá le había encargado comprar algunas cosas.

Sin más, comencé a caminar rumbo a mi casa. En eso, un auto se subió a la banqueta casi atropellándome.

-¡¿Qué te pasa, idiota?! – grité -¿Qué no…?

Las palabras murieron en mi boca tras ver quién se bajaba del auto.

-C-chanyeol, ¿qué…?

-¿Hace cuánto? – me preguntó de repente.

-¿Qué?

-¿Hace cuánto estás con él?

-¿Con quién? No te entiendo.

-¡¿Hace cuánto sales con Kai?! – gritó. Jamás le había visto así.

-N-no estoy con él.

-¡No mientas! Los vi en el receso, ¡estaban besándose! ¿Por eso fue que te alejaste de mí, no? ¡Seguramente él te lo pidió!

-¡Basta, Chanyeol! – dije –No sé por qué mierda te pones así. No estoy con Kai, sólo somos amigos así como tú y yo lo éramos.

Demonios, creo que acabo de joderme.

-¿Lo éramos?

¿Qué hago?

-Sí, éramos. Ya no quiero tener nada que ver contigo.

¿Qué estoy diciendo?

-¿Por qué? ¿Qué demonios te hice?

Estar con esa bruja. Ignorarme. Aplastar mi corazón.

-Me voy a casa. No quiero hablar contigo – comencé a caminar, pero él me detuvo.

-No te vayas.

Maldición. No digas eso, no ahora.

-Suéltame.

-Baek, te necesito. Eres mi mejor amigo.

¿Mejor amigo? ¿Qué no te das cuenta de que me muero por ti?

-Jódete, Chanyeol. Tú y yo ya no somos amigos.

-Pero ¿por qué? Dame una razón.

-¿Por qué? – felicidades Baekhyun, haz comenzado a llorar -Porque...porque...

-Ya déjalo en paz – escuché que decían a mis espaldas.

-¿Qué haces aquí? – preguntó Chanyeol. Yo sólo bajé la cabeza, quería esconderme.

-Qué te importa. Vamos Baek.

-S-sí – contesté. Demonios, estuve a punto de confesarme.

-Él y yo no hemos terminado de hablar.

-Claro que sí – dije con las pocas fuerzas que me quedaban –No quiero verte más. Olvídate de que alguna vez fuimos amigos.

Kai me abrazó y metió a su auto, luego él hizo lo mismo y nos fuimos.

-Gracias por salvarme – le dije.

-No te preocupes. Todo estará bien.

-Eso espero.






~•~






Dos semanas después, me enteré de que Chanyeol había dejado la escuela. Muchas veces quise ir a su casa, pero sabía que si lo hacía sería volver a lo mismo, regresar al maldito sufrimiento del que me había costado demasiado salir.

Kai y yo habíamos comenzado una especie de relación; es decir, no éramos novios oficialmente, pero salíamos juntos, nos abrazábamos, besábamos y...“lo demás”.

Una noche, mientras estaba en mi laptop, me llegó un MP en Facebook. Lo abrí pensando que era Kai, pero no.

-Park Chanyeol – acaricié con mi voz su nombre.

Era una carta. No sabía si leerla o no. Tras varios minutos, opté por echarle un vistazo.

Baek:

No sé por qué pasó lo que pasó entre nosotros. No sé por qué, de la nada comenzaste a alejarte de mí. ¿Te hice algo? ¿Dije algo malo? Si lo hice me disculpo por ello.

Lamento no poder decirte esto frente a frente, pero, ahora, ya no vivo en Seúl. Ahora estoy en Inglaterra. Mi padre consiguió un trabajo aquí y tuve que mudarme.

Sé que no te interesa, pero de modos te lo diré: ¡Dara y yo tendremos un bebé! Aww, me muero de ganas por saber qué es. ¿Crees que sea un buen padre?

Dara no es una mala chica. Es algo alocada y rebelde, pero así me gusta.

Dudo mucho volver a Seúl, pero si lo hago juro que iré a visitarte y a presentarte a mi mini-Chanyeol o a mi mini-Dara.

Hmm…¿qué más? ¡Ah, sí! Gracias haber sido mi mejor amigo y por soportarme tantos años. Te extrañaré mucho…no espera, ya lo hago :’c

Espero que seas muy feliz con el negro de Kai. Nunca pensé que ustedes fueran compatibles. Pero bueno, los opuestos se atraen ¿no?

Creo que es todo lo que tenía que decir. Cuídate mucho. Te quiero.

Hasta siempre, tu mejor amigo, Chanyeol.

Cerré la ventana. Estaba hecho un mar de lágrimas. Mi pecho dolía como si hubiese recibido miles de golpes.

Me recosté en la cama y tomé entre mis brazos uno de los peluches que Chanyeol me había regalado.

¿Por qué se fue? ¿Por qué tuve que enamorarme de él? ¿Por qué soy tan estúpido?

¡¿Por qué nunca se dio cuenta de que lo amaba?!






~•~






Al día siguiente le pedí a Kai que viniese a mi casa. Todo el día se la pasó a mi lado.

Y otra noticia vino a mí…

-Yo siempre he estado enamorado de ti. Pero no hacía nada porque sabía que tu corazón le pertenecía a Chanyeol, aunque él nunca lo supiera.

Lo abracé con fuerza. No quería escuchar más.

-Gracias.

-¿Gracias?

-Por amarme.

Deshice el abrazo y lo besé profundamente.

Siempre pensé que nunca sería amado. Que no había ser sobre la tierra que me quisiera, pero estaba muy equivocado pues siempre lo tuve junto a mí.

Tal vez y el destino me había alejado de Chanyeol para que me diera cuenta de la existencia de Kai.

Como dicen por ahí: “siempre hay un roto para un descocido” y Kai es mi descocido.




Fin.