14 de enero de 2014

Only Look at Me - Parte 2

2.

Últimamente he estado pensando en darle una oportunidad a Mir, yo sé que le gusto, sin embargo él nunca me lo ha dicho, solo me manda indirectas.

Y extrañamente hoy va a visitarme a mi salón. Salgo a verlo  y tú estás ahí recargado en el barandal observando al alumnado, ¿en qué pensaras?

Mir y yo comenzamos una conversación, estoy prácticamente junto a ti, ¡MIRAME! Quiero gritarte, pero no puedo.

Entonces se acerca Victoria, le sonríes y comienzan a platicar. Molesto, comienzo a hacer más caso a Mir, pues desde hace rato me estaba comentando sobre sus tareas, o algo así.

-Nos vemos el sábado ¿si? – me dice Mir; tuve a aceptar su bendita invitación, sino no iba a dejar de joderme por Facebook.

-Sí – le digo y antes de irse besa mi mejilla, yo te doy una mirada fugaz y sonrío para mis adentros cuando me doy cuenta de que me estás viendo.
Mir se va a yo entro al salón.






*






Es viernes, por lo tanto, es el día de hacer la bendita tarea durante la hora que tenemos libre tú y yo. No sé por qué, pero como que Mir está comenzando a despertar cosas en mí y tú estás pasando lentamente a segundo plano.

Hacemos la tarea, entonces un poco más tranquilo. Estoy pensando en qué hacer con Mir, en cómo ir vestido el sábado, en qué ponerme, cómo maquillarme…

-Oye, te estoy hablando – me dices.

Te veo y sonrío apenado.

-Lo siento.

-No te preocupes – dices –El amor~ - suspiras.

-¿Qué?

-Ese chico es tu novio ¿no?

-¿Ah? N-no es solo un amigo – rectifico.

-Así se empieza – dices.

Sonrío tímidamente y continuamos con la tarea.

-Sabes, no vamos a terminar esto, ¿puedes mañana? – no, mañana voy a salir con Mir.

-No sé…creo que sí – digo mientras calculo los horarios mentalmente.

-Podemos reunirnos en la plaza ¿no?

-Sí, claro – te digo.

-¿Te parece a las 4? – rayos, a las 6 es mi “cita” con Mir. No tendré tiempo de arreglarme. ¿Qué hago?

-¿No puedes a las 2? – te pregunto.

-Hmm, sí – me contestas con una sonrisa.

-Gracias – escapa de mis labios.

-Uh…¿de nada?

-Lo siento, es que voy a salir.

-Ya veo, seguro con Mir – me sonríes pícaramente.

Simplemente bajo la cabeza y sonrío. Tú haces lo mismo.

Luego de eso, dices que tienes que irte. Yo también. Nos despedimos con un frío adiós.






*






Es sábado y estoy en rumbo a la plaza. Rayos, muero de nervios.

-Yo te aviso – le digo a mi mamá. Ella es la que siempre me lleva a todos lados; la adoro por eso.

Me dirijo hacia el área de los comedores en donde se supone que nos veríamos. Me haces la mano. Intento mantener una expresión neutral, no quiero que te des cuenta de cuánto me alegra verte.

-Hola – saludas.

-Hola – te digo.

Para mi gusto, terminamos bastante rápido la tarea.

-Bueno, creo que eso es todo – dices.

-No nos faltó nada, ¿verdad? – te pregunto mientras le escribo un mensaje a mi mamá para que venga a recogerme.

-Bastante – suspiras -Pero no hacemos el lunes ¿ok?

-Ok – te digo.

Estoy a punto de decir que me tengo que ir, pero tú callas completamente mi boca.

-¿Tienes algo qué hacer mañana? – preguntas. ¿Más tarea? No gracias, quiero mi domingo.

-No sé, ¿por?

-¿Quieres ir al cine?

¡¡¡¡¡¿QUÉ?!!!!! ¡¡¿AL CINE?!! ¡¡¡¿CONTIGO?!!!

-B-bueno… - empiezo a contestar, pero me interrumpes.

-Si no se molesta tu novio, claro – dices.

-Que no es mi novio – sonrío.

-¿Entonces, qué? ¿Aceptas?

-Sí – digo en un susurro.

-Ok, entonces nos vemos mañana, amm…pásame tu cel y nos ponemos de acuerdo luego, ¿no?

Mi corazón comienza a latir fuertemente. Me prestas tu celular y apunto mi número, luego me timbras para que el mío te registre.

Dices que ya tienes que irte, yo asiento. Pasas junto a mí y me dejas un beso en la mejilla.

¡¡POR TODOS LOS DIOSES!! ¡VOY A MORIR!

Bajo la cabeza intentado ocultar el tomate que tengo por rostro, tú sonríes. ¿Qué? ¿Te gusta verme así?






*






Y aquí estoy, en el cine, con Mir; no le presto la más mínima atención a la película, sólo estoy pensando en lo que pasó horas atrás.

¡MALDITO SEAS MINHO! ¡HAS CAGADO MI SÁBADO!

La película termina, y antes de que a Mir se le antoje algo más, le aviso a mi mamá para que venga por mí.

-Entonces, ¿ya te vas? – pregunta é.

-Sí, perdón, tengo cosas qué hacer – le digo. A veces me siento mal por tratarle así, pero es que es tan empalagoso y hartante…

-Oh… - suspira decepcionado.

-Bueno, me voy, adiós – gracias a los cielos mi mamá no tardó.






*






Por fin es domingo. El reloj de mi celular marca las 4:00. Acordamos reunirnos a las 6. Comenzaré a arreglarme.

Debe bastar con dos horas ¿no? Es que estoy tan nervioso que no sé qué ponerme, no sé qué hacer, no sé cómo respirar apropiadamente.

Listo. 5:35 pm. Me veo miles de millones de veces al espejo, revisando hasta el más último detalle de mi rostro y ropas. Necesito que todo se vea perfecto. Necesito que te fijes en mí, que ya no me veas como el chico más tímido del salón.






*






6:10 PM. No has llegado. ¿Ya no vendrás? ¿Te diste cuenta de que lo aburrido que soy?

-Hola – tu voz me saca de aquellos pensamientos negativos.

-H-hola – te digo.

-Perdón, el camión tardó en llegar a mi paradero – me dices con una tímida sonrisa.

-No te preocupes.

-Bueno, vayamos al área de los cines – me dices.

Tras escoger una película, pasamos a comprar las palomitas…¡rayos! Acabo de recordar que no puedo comerlas; tengo brackets. Si llego a hacerlo, todas las cáscaras del maíz de clavaran y atoraran entre los malditos fierros.

-N-no puedo comer palomitas… - te digo con gran timidez.

-¿Por qué? ¿Por tus brackets? – preguntas; asiento –No te preocupes, ¿puedes comer nachos?

-Lento, pero sí, sí puedo – te digo.

-Perfecto. Unos nachos para dos, por favor – pides.

¿Para dos? ¡¿Comeremos del mismo plato?!

Veo que sacas tu billetera y pagas. No me atrevo a decirte que puedo pagar la mitad; sí, soy muy egoísta, pero es que necesito juntar dinero para comprarme una BB Cream por eBay. Lo siento.

-Bien, ahora vamos, que ya casi empieza la peli – dices felizmente. Rayos, cómo amo que sonrías de esa manera.






*





Por todos los fanfics que he escrito; la sala está que rebosa de gente, pero por suerte, ahí están nuestros lugares. Por un momento pensé que algún par de idiotas lo habría ocupado.

Una vez acomodados, las luces se apagaron y la película empezó.

Pones los nachos en tus piernas. ¿Qué mierda? ¡¿Quieres que muera?! Obviamente no voy a…

-Puedes agarrar con confianza, es de los dos – dices tranquilamente. ¿Con confianza? Que alguien me saque de aquí.

Lentamente, paso mi mano y tomo una de esas tostadas redondas. Tomo una rodaja de chile jalapeño y luego la sumerjo en el queso. Hace mucho que quería comer nachos.

Cuando me doy cuenta, me estás viendo.

-¿Qué? – sale de mi boca; como siempre, mi boca actuando antes que mi cerebro.

-Es que comes chistoso – me dices.

¿Qué fue eso? ¿Una burla? ¿Una crítica?

Sonrío. Me meto media tostada a la boca.

La película era realmente buena. Puedo decir que el 89% de mi atención estaba en ella y el 11% restante estaba en qué momento puedo tomar una tostada y no chocar con tu mano.

Al poco rato, sacas tu celular y comienzas a teclear y a reírte. Intento no tomarle importancia, pero ¡rayos! No me dejas escuchar la película.

Guardas tu celular, comes un par de nachos, bebes un poco de tu refresco y…

-¿Crees que le guste a Victoria? – me preguntas.

Mi corazón se parte a la mitad con aquello.

-N-no sé – finjo estar pendiente de la película.

-Es que Taemin acaba de decirme que ella se lo platicó y pues…no sé, ¿tú qué crees?

-Yo…pues… - ¿qué hago? ¿qué digo? –N-no sé.

-Ella es bonita y que yo sepa no tiene novio por el momento, tal vez…

-Minho, ¿podrías…hacer silencio? – lo siento, pero enserio, ya no sigas con esto. Me lastimas. Haz hecho añicos todas mis malditas ilusiones.

-Lo siento, perdón. Pensé que no te gustaba la película – dices.

No vuelves a hablar para nada.

Las luces se encienden y la gente comienza a salir.

-Kibum, perdón si sigo insistiendo, pero, ¿crees que deba hacerle caso a Victoria?

MÁTENME, POR FAVOR.

-Si te gusta, sí – contesto rápidamente. Quiero irme a casa, quiero tirarme a la cama y escuchar música corta venas. Quiero llorar.

-Pero…bueno… - bajas la cabeza –A mí me gusta otra persona…la verdad no sé si me gusta, pero me llama mucho la atención y…

¡Cállate! ¡No sigas!

-Entonces conquista a esa persona – te digo de la manera más fría que puedo.

-No puedo, nunca he tenido novia o algo. No sé cómo hacerlo.

-Yo…tampoco, lo siento, no sé qué más decirte, soy un tonto en estos temas – sonrío con pena.

-Kibum.

-¿Hm?

-Me gustas…

¡¿QUÉ ACABAS DE DECIR?! ¡REPÍTELO POR TODOS LOS DEMONIOS! ¡¡REPÍTELO CHOI!!

Parpadeo millones de veces. No sé qué hacer, no sé hacia dónde mirar.

-Es decir… - haces una pausa que para mí es insoportable –Me caes muy bien y quiero conocerte más. No sé…quiero intentar algo contigo, digo, si tú quieres y pues…

No pude soportarlo más; te abracé con todas mis fuerzas. Gracias, gracias por esto. Siento que no me lo merezco por ser tan egoísta y mala persona, pero…

-¿Qué…?

Mi lengua se enreda. Odio tener que hablar de mis sentimientos, pero si no lo hago ahora, voy a repetir aquella horrible historia en la que nunca pude decirle lo que sentía al chico que yo le gustaba (y qué también me gustaba). Sufrí mucho y tardé en superar mi idiotez.

Este es tu momento Kim Kibum; no te apendejes como siempre, ¡habla de una maldita vez!

-Sí, sí quiero intentar algo contigo… - digo casi en un susurro. Espero que lo hayas escuchado porque dudo mucho poder repetirlo.

Mis oídos se inundas de tu hermosa, pero tímida risita. Tomas mi mano con suavidad y entrelazas mis dedos con los tuyos.

-A partir de hoy, ambos dejamos de ser unos forever alone.

Sonrío como un idiota.

Gracias a la vida y al destino por permitirme esto. Muchas gracias por darme otra oportunidad tras haber hecho lo que hice con aquel pobre muchacho.

Cierro un poco más la mano, haciendo que nuestro agarre sea un poco más fuerte.

-¿Quieres tomar un café? – me preguntas.

Voy a quedar obeso, pero qué más da. Mi corazón por fin se siente lleno y reparado; por fin siento que tengo vida; que abandono la obscuridad en la que estaba sumergido.

No puedo esperar en llegar a casa y gritar que, por fin, luego de casi 19 años de soltería nivel experto, tengo a alguien a mi lado.







FIN


Nota: perdón si tiene errores; no lo revisé. Estoy de floja.

Only Look at Me - Parte 1


» Autora: Kang

» Grupo: SHINee 

» Pareja: MinKey

» Clasificación: +13

» Advertencias: AU, drama, intento de fluff (?).

Resumen:

Y aquí estoy una vez más; en mi salón, observándote discretamente. Quiero hablarte, pero me muero de pena…




° ° ° ° °



Only Look at Me

1.


Y aquí estoy una vez más; en mi salón, observándote discretamente. Quiero hablarte, pero me muero de pena.

Estás conversando animadamente con una niña, ¡demonios! Cómo quisiera que me sonrieras de esa manera. Aquella chica es linda, no puedo negarlo, ¿te gustará?

Los celos me comen vivo; murmuro varios insultos hacia ella, espero que nadie me escuche.

-¿Entendiste algo? – pregunta mi amigo, Onew.

-¿Ah? No – contesto. Porque estoy concentrado viendo al estúpido, bobo, nerd, lindo, bonito de Minho.

Matemáticas, cómo las odio. Maestra, ¿podría tan sólo explicar? Deje de meter la física y la química, no tienen nada qué ver.






*






Por fin acaba la clase; sales corriendo del salón, yo solo te sigo con la mirada; odio hacerlo, pero si no puedo hablarte, por lo menos puedo verte ¿no?

Platico un poco con Onew, nos reímos juntos, se nos une Jonghyun, un chico con el que estudié hace algunos años atrás. Estábamos en lo mejor de la plática, cuando entras al salón, mis ojos y toda mi atención se centra en ti, Onew no se da cuenta, pero Jonghyun sí, bueno, eso creo.

Al poco tiempo la maestra de literatura; cómo la adoro, sus clases son tan divertidas, el único defecto que le encuentro es que es una presumida de lo peor, pero va, eso no importa mucho.

-Jóvenes, hoy no haremos nada ¿les parece? – pregunta.

Já, maestra, la respuesta es más que obvia, digo para mis adentros.

-Maestra, ¿sabía que a Nichkhun le gusta Victoria? – dice uno de mis compañeros.
-¿Enserio? – sí, le encanta el chisme -¿Es cierto eso Nichkhun?

-¿Qué? No, claro que no – se defiende el pobre.

-A ver jóvenes, ¿quiénes del salón se gustan?

Sólo atino a sonreír, pero, aquellas risitas tímidas que compartía con Onew desaparecieron cuando los amigos de Jonghyun comenzaron con su bulla.

-Hay te hablan Jonghyun~ - dijo uno de ello mientras me señalaba.

-¿Qué? Dejen de estarme fregando.

Odio que hagan eso. Solo porque lo ayudé con algunas cosas de inglés y porque habla conmigo no significa que le guste.

-Maestra aquí hay uno – demonios, no.

-¿Quién?

-Jonghyun – lo señala.

-Jonghyun, ¿quién te gusta?  - no maestra, por favor, no insista. Rápidamente te busco con la mirada y, para mi mala suerte me estás viendo, ¿por qué? Porque los amigos de Jonghyun me están señalando.

Enrojezco en cuestión de segundos. Deja de verme; mi corazón late con fuerza. Oh demonios, no sonrías, por favor. Bajo la cabeza, no sé donde esconderme, todo el salón nos están viendo a Jonghyun y a mí.

-Bueno… - comienza a hablar la maestra, gracias al cielo cambió el tema. Suspiro e intento relajarme.

-Solo les encanta joderme la vida – dice Jonghyun a sus amigos.
-Perdón Kibum, no nos hagas caso – se disculparon.

Yo sólo sonreí. Estaba más nervioso porque tú me viste que por la vergüenza que acabo de pasar gracias a los “payasos” que tengo por compañeros.







*






Otra clase más acaba; me estiro en la silla; ya quiero irme a casa, no aguanto. ¡Me lleva! De nuevo estás platicando con ella. Rápidamente me incorporo y te veo de reojo y ahí está esa maldita sonrisa matadora.

Y en eso, entra la maestra de sociología.

-Chicos, pónganse en parejas, vamos a trabajar- dice.

Rápidamente se hacen, tú estás con ella ¿por qué? ¡¿TE GUSTA?! Demonios, no, por favor,  ¡mírame! no creo que a ella le gustes.

Estoy concentrado pensando en ti, cuando la maestra comienza a cambiar las parejas.

-¿A todos nos va a cambiar? – le pregunto a Onew.

-Sí – me contesta. Como odio esto.

-Tú, chico – la maestra me toca el hombro – Con él – me volteo y detrás de mí está Jonghyun, ¡no! ¡Que no me toque con él!  -Con él que está al final – agrega; ¿qué? El que está al final eres tú; mi corazón comienza a latir con fuerza; tomo mi mochila y bajo la cabeza mientras camino hacia ti, necesito ocultar mi sonrojo. A veces, odio tener la piel tan blanca.

Me siento junto a ti y pienso que no es posible, de todas las personas en el salón, ¿me tenía que tocar contigo?

-¿Estudiaste? – me preguntas.

-Más o menos – respondo sin mirarte a los ojos; no puedo hacerlo.

Asientes con la cabeza y acomodas tus bolígrafos; eres tan lindo con o sin esos lentes de nerd que tienes.

La maestra nos reparte la hoja y comienza a explicar.

-Jóvenes este trabajo es el que tiene más valor en todo este período. Tienen que hacerlo debidamente.

Con miedo y nerviosismo, me pego un poco a ti e intento leer lo que dice la hoja. Es un trabajo largo.

-¿Todos los puntos son con nuestra bina? – pregunta un chico.

-Sí – responde la maestra –Lo más seguro es que tengan que reunirse fuera o dentro de la escuela para hacerlo.

Oh, ¿es enserio? ¡¿Yo, Kim Kibum, tengo que hacer todo este trabajo con Choi Minho, el chico que me gusta?!

-Sí que es mucho – dices, yo sólo asiento.

-Bueno, les daré la clase de hoy para que comiencen a organizarse – dice la maestra.

Mi corazón sigue latiendo con fuerza. Te pones a leer la hoja, yo admiro tu perfecto perfil. Demonios, ¿por qué eres tan lindo?

-Mira, esto parece ser más fácil, podemos comenzar a hacerlo ¿no? – me preguntas y me muestras la hoja, la “leo” rápidamente y asiento. ¿Dónde carajo está mi voz? Quiero salir corriendo del salón, quiero regresar con Onew, quiero y necesito a mi mejor amiga, Nicole, ¿para qué? No lo sé, solo sé que la necesito.

Sacas tu libro y te pones a leer, se nota que sólo estamos juntos por tarea. Suspiro algo decepcionado.

-Esto…ve que puntos puedes hacer ¿si? – me dices.

Asiento de nuevo. Me regaño mentalmente, suspiro e intento concentrarme en la tarea. Comienzo a escribir algunos conceptos y tú sólo me miras, ¿podrías dejar de hacer eso? ¡Me cohíbes!

-Oye, ¿así se escribe “revisó”? – me preguntas, yo sonrío; ¿tan mala ortografía tienes?

-Sí, así se escribe – te contesto y tú sonríes; oh no, ahora quiero darme de cabezazos contra la silla o contra la pared, no lo sé, lo primero que encuentre.

Ambos estamos en silencio haciendo la tarea, cuando se acerca la persona que menos quería que lo hiciera.

-¿Cómo vas? – le preguntas a esa chica.

-Bien, está muy largo el trabajo ¿no? – comenta mientras busca algunas cosas en su mochila, la cual dejo al cambiarse de lugar.

-Sí, está muy largo – le dices, y le regalas varias sonrisas.

Secretamente, hago una mueca con la boca y vuelvo a mis apuntes. Rayos, tengo una duda, ¿te pregunto? ¿si? ¿no?

-Oye… - murmuro, me escuchas.

-¿Si?

-¿Qué es esto? – señalo el concepto impreso en el libro, tú te pegas demasiado a mí y comienzas a leerlo; no puedo con esto, en serio quiero irme.

-Ah, está muy fácil…

Me explicas mientras me miras fijamente, ¡deja de hacerlo! No puedo mantenerte la mirada, es demasiado intensa.

-Ok, gracias – te digo y regreso a lo que estaba haciendo.

Y así pasan los minutos.

-Listo – me dices.

Y de nuevo asiento, creo que es lo único que sé hacer.

-A mí me falta mucho – digo, solo para hacer plática.

-A ver – me pides la libreta, te la doy.

Comienzas a leer. Pensé que comentarías: “oh qué linda letra”, como todos lo hacen, pero no, tú solo estás concentrado en el trabajo y no en mí. Rayos, ¿por qué me doy tanta importancia? Qué egoísta soy.

-Está bien, sigue haciéndolo – dices –Veré qué mas se puede hacer – sonríes.

Yo asiento y te sonrío.

La hora acaba más rápido de lo que pensaba. Me levanto rápidamente y regreso a mi lugar, junto a Onew y a Jonghyun.

-¿Me acompañas a comprar? – te pregunta Victoria, la chica con la últimamente platicas mucho.

-Claro.

Intento no darle importancia a aquello, pero es imposible. El descanso pasa lento y tú no llegas. 

Fastidiado, busco entretenimiento en mi celular; entro a tumblr. El timbre suena, tú entras con ella.
La verdad, no te hago mucho caso, pues ya encontré algo interesante revisando las tags. Sólo queda una clase más y por fin podré irme a casa.






*






Gracias a los cielos, ya estoy  en mi hogar; entro a mi habitación, pongo mi mochila junto a mi escritorio y voy a la cocina; muero de hambre.

Tras servirme algo, me dirijo a la sala donde está mi mamá y mi hermanita, ambas ven televisión.

Mientras ceno, reviso mi facebook ya que no lo he abierto en todo el día. Casi me atraganto con la leche que estaba bebiendo. ¿Por qué? Porque entre las dos solicitudes de amistad que tenía estabas tú.

Rápidamente acepto. Respiro profundo y continuo con mi comida a la vez que veo algunas otras cosas.

Estaba a punto de salirme cuando me llega un MP y mi corazón late con fuerza al ver de quién se trataba.

-Hola – leí.

-Hola – te conteste.

-Oye, ¿qué vamos a hacer con el trabajo? Es para el viernes.

Todavía faltaba una semana, pero bueno, tienes razón, hay que adelantarlo.

-¿Tienes horas libres? – te pregunto. Obviamente me las sé, pues siempre que no tengo clase te veo en la biblioteca, a veces odio que coincidamos hasta en eso.

-Sí, lunes y viernes ¿y tú?

-Yo también tengo esos días.

-Perfecto, entonces podemos reunirnos para hacer la tarea ¿no?

-Sí – te contesto.

-Ok, ok, entonces ya quedamos.

-Ok.

Y hasta ahí quedo la conversación. Lindo ¿no? Sólo estamos juntos por trabajo, no porque tú quieras entablar una amistad.





Continuará