Dynamite: Explosive - Capítulo 17

Capítulo 17: Cuando el río suena, agua lleva

Mark había regresado a casa justo antes de la cena y lo primero que le recibió fue ver a su papá Doyoung regañando a Lucas por haber olvidado descongelar el pollo como le había encargado antes de irse a trabajar; no quiso interrumpir aquella reprimenda así que pasó en silencio y subió a su habitación, pero antes de entrar a esta, se quedó mirando la puerta del cuarto de huéspedes.

-Me daré un baño y luego hablaré con él – dijo para sí mismo.

Cerca de 20 minutos después, ya se encontraba tocando la puerta de la habitación.

-Adelante – escuchó la voz de Donghyuck, algo que le puso aún más nervioso.

-Hola – saludó Mark.

-Ah, eres tú – murmuró Donghyuck desanimado.

Mark tomó aire.

-Terminé con Wendy – confesó.

-Oh, pensé que ya lo habías hecho.

-Pero ya es definitivo.

-¿Y por qué no estás haciendo un drama?

-Porque… quizás ya me había hecho a la idea de que nuestra relación no daba para más.

-Primera cosa sensata que dices.

-¿Qué haces? – preguntó Mark tras sentirse algo ignorado por el menor puesto que este estaba bastante concentrado en su laptop.

-Busco nombres para el bebé.

El mayor no pudo evitar sonreír, aquello se le había hecho muy tierno.

-Donghyuck.

-¿Qué?

-Mírame.

-Estoy ocupado.

Mark rodó los ojos, tomó la silla y la giró con algo de brusquedad.

-Escúchame bien.

El menor levantó una ceja, sin comprender.

-Me gustas mucho.

Donghyuck enrojeció apenas escuchó aquello.

-¿Q-qué?

Mark asintió, Donghyuck se puso de pie y lo abrazó fuertemente.

-Creo que es bastante obvio que tú también a mí – confesó el menor.

Mark sonrió de oreja a oreja; por supuesto que lo sabía, pero no quería aceptarlo.

-Ahora sí, ¿me das un beso? – preguntó el moreno.

Mark pegó su frente a la de Donghyuck.

-Te daré los que quieras.

-Ew, qué cursi – bufó, acortando la distancia, besándolo lentamente.

El beso se fue intensificando, pero se vio interrumpido por el sonido de la puerta siendo abierta.

-Oh my god! – era Lucas -Lamento interrumpir su “no somos nada” momento, pero ya está lista la cena.

-Ya somos algo – aclaró Mark.

Lucas abrió los ojos con sorpresa.

-¿Le dijiste? – preguntó Lucas a Donghyuck.

-¿Decirme qué? – cuestionó Mark.

-¡Que le gustas!

-¿Lo sabías?

-Obvio, sólo fue cuestión de preguntarle.

|Flashback|

Una tarde, mientras Donghyuck disfrutaba de su día libre, Lucas entró a su habitación aprovechando que la puerta estaba abierta.

-Hola, hola – saludó el mayor.

-Hola – saludó Donghyuck mientras jugaba uno de sus juegos en línea.

-Tengo una pregunta que no me deja dormir – dramatizó Lucas, sentándose en la cama, junto al menor.

Donghyuck puso pausa y miró al mayor, indicándole que continuara hablando.

-¿Desde cuándo te gusta Mark?

El moreno enrojeció apenas escuchó aquellas palabras.

-Porque… es obvio que lo hace, ¿no?

Donghyuck asintió.

-Creo que al poco tiempo de conocerlo comenzó a atraerme, pero sabía que tenía novia, así que ni de loco me entrometería hasta que de un día a otro llegó con aquella propuesta y pues… no pude negarme y eso “empeoró” lo que sentía por él.

-Hmmm – exclamó Lucas.

-Pero estoy seguro de que Mark no siente lo mismo – Donghyuck murmuró decepcionado.

-Te equivocas, en la vida imaginé que estaría con otra persona que no fuera Wendy, pero tú lograste tentarlo hasta el punto en que hiciste que terminaran.

-No fue mi culpa – aclaró el moreno.

-Claro que sí, eres carismático, rebelde y arriesgado algo que Mark siempre ha admirado, pero es muy cobarde para aceptarlo.

-¿A-admirado? – nuevamente, las mejillas de Donghyuck comenzaron a teñirse de rojo  carmín.

-Así es – Lucas le palmeó el hombro -Y además le darás un mini-Mark, o una mini-Mark, no sabemos – agregó.

El menor acarició su vientre, sonriendo tímidamente tras escuchar aquellas reconfortantes palabras.

-Te daré un consejo – dijo Lucas -Cuando tengas la oportunidad, pídele que te de un beso y si se pone nervioso y huye, es porque… “cuando el río suena, agua lleva” – dicho esto, salió de la habitación, dejando a Donghyuck más que confundido.

|Fin del flashback|

-¿Desde cuándo son tan amigos? – ya no podía negar que la cercanía de su hermano con Donghyuck, no le hacía gracia.

-No seas celoso, Markitos, Donghyuck sólo tiene ojos para ti.

-Ya, basta de dejarme en vergüenza, vamos a cenar. Muero de hambre – interrumpió el moreno.

Los tres chicos salieron de la habitación rumbo al comedor.

-¡Papá Doyoung, papá Taeyong! – gritó Lucas a todo pulmón.

-¿Qué pasa? – cuestionó Taeyong.

-Mark y Donghyu—

Mark cubrió la boca de su hermano.

-Donghyuck se mudará a mi habitación, ¿verdad? – dijo mirando al aludido.

El moreno le miró sorprendido por la inesperada noticia.

-¿Es cierto eso? – preguntó Doyoung a Donghyuck.

-Sí – contestó el menor.

-Qué bueno, porque el vientre de Donghyuck no tarda en crecer – dijo Taeyong.

La cena transcurrió de lo más tranquila, exceptuando que Lucas de vez en cuando codeaba a Mark para que le diera la “otra” noticia a sus padres, pero el menor no cedió en ningún momento puesto que necesitaba ponerle un nombre ese algo con Donghyuck.

💞

La temperatura de la habitación se había elevado considerablemente, a pesar de tener el aire acondicionado encendido; el par de jóvenes recostados en la cama se encontraba en una intensa batalla de besos y caricias.

-Espera – Donghyuck puso un mano sobre el pecho de Mark para alejarlo de su cuerpo.

-¿Qué?

-No… no podemos – dijo agitado, evitando la mirada del mayor.

-¿Qué se supone que deba hacer durante los meses que faltan? – exclamó Mark.

-Usa tu mano – bufó Donghyuck, incorporándose en la cama mientras acomodaba sus ropas.

-Al menos, ¿podrá haber momentos como este? – cuestionó.

-Supongo que sí – respondió Donghyuck.

De pronto, ambos se quedaron en silencio; Mark supuso que era el momento perfecto, tomó aire buscando tranquilizar sus nervios.

-Donghyuck – llamó Mark, haciendo que el aludido diera un pequeño brinco del susto.

-Dime.

Mark apretó las sábanas de su cama, necesitaba juntar fuerzas para hacerlo.

-¿Quieres ser mi novio? – murmuró con los ojos cerrados y la piel erizada.

Donghyuck pensó haber escuchado mal, pero algo le decía que no se equivocaba.

-Me gustas mucho… demasiado, tanto que no puedo respirar – confesó Mark, liberando al fin aquello que presionaba su pecho desde tiempo atrás -¿Donghyuck? – llamó preocupado puesto que el menor permanecía en silencio.

-Nunca— – Donghyuck hizo una pausa, causando pánico al pobre corazón de Mark -Nunca nadie me había dicho algo tan lindo.

Mark soltó un suspiro de alivio; por un momento pensó lo peor.

-Claro que quiero ser tu novio, Mark. Desde hace mucho que quiero serlo – admitió el moreno, sorprendiendo en demasía al aludido.

Ambos se miraron fijamente hasta que Mark no pudo más y lo abrazó posesivamente.

-Sé que soy inmaduro y cobarde, pero te prometo que haré mi mayor esfuerzo por ambos – dijo Mark mientras acariciaba el vientre de Donghyuck.

-Más te vale – bufó Donghyuck, besando los labios de su ahora novio.

Continuará…