28 de julio de 2018

Dynamite - Capítulo 8



Capítulo 8:
Secreto


Taeyong salió corriendo del baño mientras se vestía con rapidez.

-¡Doyoung! ¡Doyoung! – movía al menor.

-¿Qué?

-Es Jaehyun.

-What the fuck?! ¿No se supone que no venía?

-No sé qué hace aquí. Ve al baño.

Doyoung salió de la cama y corrió a esconderse en donde Taeyong le indicó.

-Hola – saludó el pelinegro tras abrir la puerta.

-Tardaste mucho en abrir – Jaehyun le recibió con un beso.

-Estaba bañándome.

-¿Ah sí? ¿Por qué no me esperaste? – Jaehyun le había rodeado la cintura con ambos brazos mientras le besaba el cuello.

Taeyong iba a contestar algo cuando notó que las capturas de pantalla y el examen de embarazo estaban sobre su buró.

-Doyoung está aquí – fue lo primero que se le vino a la mente para distraerlo.

-No lo veo por ningún lado.

-En el baño.

-Demonios, entonces… ¿te parece si salimos un rato?

-Claro, estoy libre. Espera afuera – Taeyong comenzó a empujarlo hacia la puerta.

-¿Ah?

-Sí, ahorita salgo – cerró la puerta antes de que Jaehyun pudiera objetar algo. Lanzó un suspiro de alivio y guardó la evidencia.

-¿Así o más obvio? – bufó Doyoung.

-Dejaste las capturas y el examen a la vista – reclamó Taeyong.

-¿Yo? Tú fuiste el último que las tocó.

Taeyong rodó los ojos, no tenía ánimos para discutir.

-Hey, al menos péinate, ¿no? – Doyoung se acercó al mayor y le arregló el cabello, Taeyong sintió que el pulso se la aceleraba.

-Está bien, de todos modos, Jaehyun lo dejará peor.

-Agh, tenías que salir con una tontería.

Taeyong le miró fijamente por algunos segundos.

-¿Qué? ¿Me vas a besar? – preguntó Doyoung.

El mayor lo tomó de la cintura y lo besó con ferocidad. Doyoung rodeó su cuello con ambos brazos para profundizar el beso. Taeyong se alejó lentamente.

-Nos vemos – se despidió Taeyong -Estoy listo – le dijo a Jaehyun tras salir de la habitación.

-Vamos – Jaehyun lo tomó de la mano, Taeyong se sintió el ser más malo sobre la faz de la tierra.









💥









[Horas después]

Jaehyun había estacionado su auto afuera de la universidad de Taeyong. Ambos regresaban de su “nidito de amor” como Doyoung apodó al departamento.

-Tengo algo que decirte – la voz de Jaehyun sonaba triste.

-¿Qué es?

-Doyoung y yo… tuvimos relaciones hace como un mes.

Taeyong sintió que el alma se le iba del cuerpo, de nuevo el tema del embarazo.

-No sé si está embarazado, dijo que haría una prueba esta semana y–

-Ojalá lo esté – interrumpió Taeyong -Para que ya no tengas que volver a acostarte con él – sentía que no merecía tan si quiera actuar ofendido, puesto que lo que él había hecho era algo mucho peor.

-Lo siento – susurró Jaehyun, cabizbajo.

Taeyong lo besó con ternura.

-No sabes cuánto te quiero – dijo Jaehyun, haciendo que el corazón de Taeyong se partiera aún más.

-Yo también – respondió para después darle un beso en la frente y salir del auto.

Jaehyun se fue y Taeyong se quedó un rato contemplando las estrellas; su vida se había hecho un lío en cuestión de semanas. Ingresó a la universidad y fue directo a la cafetería, no tenía ánimos de ver a Doyoung.

-¿Por qué esa cara larga?

-¡Doyoung! – exclamó.

-No me digas que terminaron – fingió sorpresa.

-No estoy de humor para tus cosas – bufó alejándose del menor.

-Qué bipolar eres. Hace un rato bien que me–

-¡Taeyong! Hace días que no te veo, ven, cenemos juntos – Taeil alejó al pelinegro de ahí, dejando a Doyoung con las palabras en la boca.

-Gracias – suspiró Taeyong una vez que estuvieron en la habitación del mayor.

-¿Qué pasa? Te ves terrible.

-Doyoung está embarazado y es mío.

Taeil casi se ahoga con el agua que estaba bebiendo.

-¿Cuándo te enteraste?

-Hoy.

-P-pero… ¿y si no es tuyo?

-Tiene el tiempo exacto.

Taeil guardó silencio por algunos segundos.

-¿Qué van a hacer?

-Querrás decir, ¿qué voy a hacer?

-No entiendo.

-El muy idiota quería darlo en adopción y obviamente no se lo iba a permitir – suspiró.

-Taeyong, sabes que te quiero mucho y todo pero, ¿cómo vas a mantenerlo? Eres un estudiante y no cuentas con más apoyo que el de tu abuelita.

-Estoy consciente de eso, pero… es mi hijo, ¿entiendes? No pienso abandonarlo como mi madre lo hizo conmigo.

-¿Y Jaehyun?

Taeyong comenzó a llorar tras escuchar aquel nombre.

-¿Qué le dirás cuando vea que tienes un niño así, de la nada?

-No lo sé, tengo miedo de pensarlo.

-Pero tienes que hacerlo, por el bien de ambos y del bebé. 

-¿Por qué Doyoung? ¿Por qué precisamente él? – dijo entre sollozos.

Taeil lo abrazó con fuerza. Taeyong había sufrido demasiado en la vida; su única felicidad eran su abuelita y Jaehyun.

-Lo siento mucho – susurró el mayor, mientras de palmeaba la espalda.








💥








[Días después]

Taeyong dormía plácidamente cuando sintió que algo recorría su cuerpo.

-¡Doyoung! ¿Qué mierda haces? – gritó tras verlo salir de entre las sábanas.

-Dijiste que podíamos hacerlo cualquier día – quiso besarlo, pero Taeyong le empujó.

-Olvida lo que dije.

-Bueno, entonces iré con Johnny – salió de la cama.

-Que te vaya bien – se cubrió con las sábanas.

Doyoung bufó molesto.

-Mierda – exclamó volviendo a sentar en la cama de Taeyong.

-¿Eres sordo? Te dije que– ¿estás bien? – preguntó, Doyoung tenía la cabeza gacha.

-Un mareo, pero ya se está pasando.

Taeyong se sentó en la cama para verlo mejor.

-¿Seguro?

-Te odio por dejarme así – bufó poniéndose de pie.

-Espera – Taeyong le detuvo de la muñeca -¿Aun quieres…?

-Me las puedo arreglar solo – se soltó con fuerza y se metió a su cama.

Taeyong intentó conciliar el sueño de nuevo, pero no pudo. Doyoung estaba masturbándose y podía escucharlo todo.

-Contrólate – decía para sí mismo, pero su erección opinaba lo contrario.

-¿Q-qué haces? ¿No ves que estoy ocupado? – reclamó Doyoung cuando Taeyong se metió a su cama.

-Será mejor que aproveches la oportunidad – dijo para después besarlo -Pero si ya estás listo… - dijo con burla tras haber ingresado dos dígitos en Doyoung.

Taeyong lo embestía con fuerza sin dejar de besarlo, puesto que Doyoung no era para nada sutil con sus gemidos.

-No dejes marcas – pidió Taeyong al sentir cómo el menor le clavaba las uñas en la espalda.

-Ah… voy a venirme…

Taeyong sonrió al verlo tan sonrojado y agitado. Lo besó una vez más para terminar ambos al mismo tiempo.

-Eso fue mejor que la vez pasada – suspiró Doyoung.

Cayeron dormidos en la cama del menor.

Al día siguiente, Doyoung despertó gracias a que Taeyong le había programado la alarma antes de irse a clases.

-Ah, qué hambre tengo – dijo para sí mismo.

Tras darse un baño, vestirse y guardas algunas cosas en su mochila, salió de su habitación rumbo a la cafetería, llegaría tarde a la primera clase, pero poco le importaba. Luego de escoger algo para desayunar y encontrase con una amiga, ambos se dirigieron a las mesas.

-¿A quién metiste anoche a tu habitación, eh? Sí que la pasaste muy bien – comentó la chica mientras caminaban -Mi habitación está al lado de la tuya, escuché todo, cariño.

-Wow, ¿qué pasa? ¿estás bien? – preguntó Taeil pues Taeyong se había atragantado con la comida.

-S-sí, bien – respondió con dificultad.

-Hmmm… aquí hay algo raro – miró a la pareja que había pasado junto a ellos hacía un momento y luego miró a Taeyong -¿Doyoung y tú han estado–?

Taeyong le cubrió la boca con una mano.

-Sí – respondió derrotado.

-Pero, ¿cómo? ¿por qué? ¿cuándo? – el mayor estaba sumamente confundido.

-Cosas del embarazo.

-Pero, ¿contigo? Le hubieras dejado el problema a Johnny y a los demás.

-Tiene a mi hijo, no puedo exponerlo así como así – susurró aún más bajo.

-Al menos tápale la boca o algo, ya los escucharon.

Taeyong enrojeció.

-¿Seguro que sólo es sexo? – preguntó Taeil.

El pelinegro asintió repetidas veces.

-Sí, sólo eso.




Continuará…

21 de julio de 2018

Dynamite - Capítulo 7



Capítulo 7:
“Es mío”

Taeil había comprado algunas cervezas y snacks para acompañar.

-Sí que ambientaste todo – exclamó Taeyong tras ingresar a la habitación de su amigo.

-Lo necesitarás – contestó el mayor.

Ambos se sentaron en el suelo, Taeil destapó el primer par de cervezas.

-Hace unas semanas, Doyoung se hizo unos exámenes de embarazo, Jaehyun vino a decirme que salieron negativos y que tendrían que volver a “intentarlo”, obviamente enfurecí, discutimos y terminé comprando cervezas. Doyoung llegó unas horas después, borracho.

-Oh no – interrumpió Taeil, suponiendo cómo terminaría todo.

-Y… pasó lo que tenía que pasar – suspiró Taeyong.

-¿Lo que tenía que pasar?

Taeyong cerró los ojos y tomó aire.

-Doyoung me atrae, físicamente. Su personalidad apesta – dijo.

-Entonces, te acostaste con él y crees que está embarazado.

Taeyong asintió.

-¿Y si no es tuyo? ¿Qué tal si estuvo con alguien antes?

-Quiero pensar que así fue, pero lo dudo.

-¿Cómo es que Doyoung no te ha asesinado?

-Porque no recuerda quién fue.

Taeil abrió los ojos con sorpresa.

-¡¿No piensas decírselo?!

-Primero necesito saber si está… embarazado.

-¿Se hizo exámenes o algo?

-Sí, pero el muy idiota los hizo en una clínica de muy mal prestigio. Lo que me intriga es que las pruebas caseras que se hizo, también salieron negativas pero los síntomas dicen otra cosa.

-¿Entonces…?

-Dejaré que pase el tiempo – suspiró -En verdad deseo que no lo esté.









💥







[Semanas después]

Luego una cansada jornada escolar, Taeyong se dirigió a su habitación, tras abrir la puerta, se topó con la imagen de Doyoung con la camisa ligeramente levantada, mirándose al espejo a la vez que acariciaba su vientre, quien, al notar su presencia, se bajó la ropa y se alejó de ahí a toda velocidad.

-¿Lo estás? – preguntó Taeyong tratando de ocultar su nerviosismo.

-Posiblemente.

El mayor tragó fuerte.

-Olvidé mencionar que Jaehyun y yo estuvimos juntos hace unas semanas.

Taeyong no supo cómo tomar aquello, puesto que su novio no le había comentado nada.

-Tiene derecho a guardar secretos, ¿no? – sonrió Doyoung orgullosamente.

El mayor estaba furioso por la mentira de su pareja, pero a la vez se sentía aliviado ya que había una alta probabilidad de que no fuera de él, pero horas más tarde su mundo daría un giro inesperado.

-¡¿Por cuánto tiempo más pensabas ocultarlo?! – Doyoung había entrado furioso a la habitación.

-¿Qué–

Taeyong fue interrumpido por unas hojas que Doyoung estampó contra su rostro. Se las arrebató al menor y apenas se dio cuenta de lo que contenían, palideció. Eran capturas de las cámaras de seguridad de la escuela.

-Doyoung– - las palabras no salían de su boca.

-¿Por qué lo hiciste, eh? ¿Buscabas venganza? ¿Humillarme?

-No, es–

Doyoung se echó a llorar.

-Si Jaehyun se entera de esto… - decía entre sollozos.

-No tiene por qu̩ hacerlo, fue una noche y ya Рdijo Taeyong, tratando de ver el lado positivo de aquello.

-Estoy embarazado, Taeyong.

El aludido se cubrió la boca con ambas manos y cerró la puerta de la habitación, la cual Doyoung había dejado abierta.

-Fui por los resultados hace un rato – le pasó el sobre al pelinegro -Y hace media hora me dieron las capturas de la cámara. Quería pensar que todo era una pesadilla, que las fechas estaban mal, pero… todo es real.



|Flashback|

Doyoung había ingresado a la habitación en donde le mostrarían la grabación de las cámaras de seguridad. Tras dar la fecha y una hora aproximada, el encargado comenzó a revisar entre los vídeos.

-Esta es la grabación de la cámara de seguridad en el pasillo de tu habitación – indicó el hombre -3:17 AM, ingresas a tu habitación; 4:03 AM sale de la habitación un muchacho; 6:31 AM ingresa de nuevo el mismo muchacho.

Doyoung pensó la que vista le estaba jugando una mala broma.

-¿P-podría… acercar la imagen?

El hombre asintió. Doyoung tuvo que ahogar un grito de desesperación tras darse cuenta de quién se trataba.

-Taeyong…

-¿Te encuentras bien? – preguntó el encargado tras notar que Doyoung estaba pálido como papel.

-S-sí – contestó con dificultad.

-¿Quieres que te imprima capturas?

-Sí, por favor.

|Fin del flashback|



Taeyong sostenía con las manos temblorosas el sobre. Doyoung tenía exactamente el tiempo que había pasado desde que estuvieron juntos.

-Pero… Jaehyun y tú–

-Fue una semana después de que tú y yo lo hicimos. Estaba seguro que era de él.

-Hablaré con él – Taeyong, quien se había sentado en la cama junto a Doyoung, se puso de pie.

-No РDoyoung lo sostuvo fuertemente de la mu̱eca.

-¿Dirás que es suyo? – el tono de voz de Taeyong se volvió serio.

-Tampoco. Le diré que es de la persona con la que estuve aquella noche pero que no sé de quién se trata.

-¿Por qué no le dices que soy yo?

-¿Y verlo sufrir? Jamás. Jaehyun te adora – pausó para limpiarse las lágrimas -Creo que… lo mejor sería darlo en adopción.

-No. Es mío.

Doyoung le miró asustado.

-¿Lo criarás tú solo? ¿Con qué dinero? – el menor había regresado a la actitud altanera de siempre.

-Existen los trabajos, por si no lo sabías.

-¿Estás seguro de que podrás? – preguntó el menor.

-Muy seguro.

Doyoung rodó los ojos.

-Está bien.

Apenas Doyoung abandonó la habitación, Taeyong se recostó en la cama y lloró hasta no poder más; se sentía decepcionado de sí mismo.







💥







[Horas después]

Taeyong estaba en la cafetería, no tenía nada de apetito y para colmo no podía desahogarse con Taeil pues estaba en clase. Estaba por ponerse de pie para tirar la comida que apenas había tocado cuando vio a Doyoung recargado en la pared conversando muy de cerca con Johnny.

-¿Entonces te veo en la noche? – preguntó Doyoung, se podía notar la lascivia en sus palabras.

-Claro que sí, cariño – sonrió Johnny.

Taeyong caminó a paso firme hacia ellos y tomó fuertemente del brazo a Doyoung.

-¿Qué demonios te pasa?

El pelinegro no dijo, sólo lo arrastró lejos de ahí.

-¡¿Cuál es tu maldito problema, imbécil?! – gritó Doyoung una vez que estuvieron en la habitación de ambos -Te demandaré, idiota.

Taeyong lo acorraló entre la puerta y su cuerpo.

-Ni porque estás embarazado dejas de estar de zorra.

-¿Y eso a ti qué te importa?

-Este niño es mío – Taeyong puso una mano sobre el vientre de Doyoung -Y tendrás que cuidarlo quieras o no.

Doyoung rodó los ojos y lanzó un largo suspiro.

-Por si no lo sabías, cuando se está así, el apetito sexual aumenta y obvio tengo que hacer algo al respecto.

-Obviamente lo sé, estamos estudiando medicina, pero… – bufó -…No tienes por qué buscar extraños – desvió la mirada.

-¿Y qué propones? ¿Que lo haga contigo?

Taeyong no respondió.

-¿Estás hablando en serio? ¿Quieres que tú y yo…?

-No quiero que nadie lastime a mi hijo.

Doyoung tragó fuerte.

-Debo estar loco por hacer esto – dicho aquello, enredó ambos brazos en el cuello de Taeyong y lo besó con hambre. Taeyong puso las piernas del menor en su cintura y lo guió a la cama -Dime a Jaehyun no vendrá hoy.

-No.

-Bien.

-¿Por qué?

-Porque tengo muchas ganas.

Taeyong no pudo evitar sonreír con aquellas palabras. Algo raro pasaba entre ambos, pero ninguno quería averiguar qué era.

El pelinegro se introdujo con lentitud en el otro. Doyoung empujó las caderas para que Taeyong entrara de una sola vez.

-¡Ah! ¿No que serías cuidadoso? – jadeó Doyoung.

-¿Te lastimé?

-No – sonrió -Sabía que no podrías resistirte – dicho esto, cambió de posiciones y quedó sobre Taeyong.

Ambos intentaban inútilmente de esconder sus gemidos, ya que el placer era demasiado y temor de ser descubiertos, aún más. Doyoung estaba bañado en sudor, lo cual excitaba a Taeyong, le traía recuerdos de aquella noche.

-Doyoung… ya voy a terminar – dijo el mayor con intenciones de hacerlo afuera.

-No, no te salgas – pidió el aludido.

-Pero–

-Tranquilo, no pasa nada.

Taeyong asintió y tras besarlo un par de veces más, terminó en él.

-Entonces… - habló Doyoung quien aún estaba agitado -¿Puedo recurrir a ti cada vez que tenga ganas?

-Sí – respondió el pelinegro.

-¿Tanto te atraigo?

-Ah, ya cállate – Taeyong se levantó de la cama y comenzó a recoger sus ropas.

-No lo haces nada mal, eh – comentó Doyoung.

Taeyong fue darse un baño mientras Doyoung se dejó vencer por el cansancio. Cerca de 15 minutos después, alguien tocó la puerta.

-Soy Jaehyun.



Continuará…

14 de julio de 2018

Dynamite - Capítulo 6



Capítulo 6
Mentiras


Taeyong despertó dando un brinco. El sol no había salido, así que supuso que seguía siendo de madrugada. Salió del auto y se dirigió con pesar al edificio de habitaciones. Apenas abrió la puerta de su habitación, se topó con la espalda desnuda de Doyoung, el cual seguía en la cama.

-¿Qué haces ahí? – preguntó inconscientemente, notando que Doyoung lloraba.

-Taeyong, lo siento, no sé qué pasó anoche – dijo mientras limpiaba sus lágrimas y recogía sus ropas.

El aludido tragó fuerte sin saber qué contestar.

-¿Viste salir a alguien de aquí? – cuestionó Doyoung.

-No, ¿por qué?

-No recuerdo con quién estuve. Es más, no recuerdo nada.

-S-sí, bueno, tengo clase – dijo con nerviosismo, no era bueno mintiendo.

-¿Dormiste en el departamento de Jaehyun?

La pregunta de Doyoung le detuvo en seco.

-No, dormí en casa de mi abuela.

-Ah, ya veo. Escucha, no le digas a Jaehyun, necesito averiguar con quién estuve primero.

-¿Para qué?

-No usé protección y… podría, ya sabes.

Taeyong palideció y sintió su corazón bombear con fuerza.

-Sí, no hay problema – se metió al baño.








💥






Doyoung faltó a todas las clases de ese día, no sólo porque no se sentía bien si no porque fue a hablar con Johnny y sus otras conquistas de una noche para averiguar si había estado con alguno de ellos. Todos dijeron que no, que no habían siquiera dormido en la universidad.

-Mierda, debió haber sido alguien del bar – dijo para sí mismo mientras caminaba de un lado a otro de la habitación.

Estaba tan metido en sus pensamientos que no notó la presencia de Jaehyun, hasta que éste le tocó el hombro.

-¡Jaehyun! – exclamó asustado.

-¿Estás bien?

-S-sí, ¿p-por qué?

Doyoung se había alejado un par de metros de Jaehyun.

-Estás pálido.

-¿Viniste a ver a Taeyong? – preguntó Doyoung para cambiar de tema.

-Sí, pero si no está–

Las palabras de Jaehyun fueron interrumpidas por el sonido de la puerta.

-Jae…hyun – exclamó Taeyong.

-Necesito hablar contigo – dijo el aludido.

Taeyong miró a Doyoung y luego a Jaehyun tratando de descifrar si el primero le había contado algo.

-¿Sobre qué? – se atrevió a preguntar.

-Los dejo solos – dijo Doyoung, saliendo rápidamente de ahí.

Taeyong lo siguió con la mirada, trataba de ocultar su preocupación, pero vamos, era terrible para eso; notó que sobre su cama había un set de sábanas nuevas, al parecer la culpa de haberse acostado con “alguien” ahí sin su permiso, estaba comiendo a Doyoung.

-Lamento lo que te dije anoche – al parecer Jaehyun no había notado nada -Nunca habíamos discutido así, y siento que fue mi culpa–

-No, fue mía. No supe controlarme.

Jaehyun lo envolvió en un cálido abrazo.







 ðŸ’¥







Doyoung recordó el nombre del bar, así que fue directo a este para preguntar. Fue cuestión de un par de billetes para acceder a la grabación de las cámaras de seguridad.

-Se fue solo – dijo el vigilante.

-¿Qué demonios hice entonces? ¿Cómo llegué a la universidad? – se preguntó en voz baja.

-Mire, la cámara de afuera le captó subiendo a un taxi.

El vigilante hizo zoom a la imagen y un recuerdo pasó como flash en la cabeza de Doyoung. Recordó haber llegado a la universidad en ese taxi.

-Gracias – dio unos billetes más al vigilante y regresó a la universidad -Debe ser alguien de ahí, estoy seguro – dijo para sí mismo, pediría la grabación de las cámaras de seguridad de la escuela. Debía proceder con cuidado, pues su suegra tenía ojos por todas partes del lugar.

Tras hablar con los encargados de seguridad, estos le dijeron que no podían darle nada a menos que llenara una solicitud.

-¿Cuánto tiempo tendría que esperar? – preguntó Doyoung.

-De 30 a 60 días hábiles – contestó la secretaria.

-¡¿Qué?!

-Son las reglas de la escuela.

-Está bien, está bien – bufó, saliendo de la oficina.

Doyoung regresó a su habitación, pensando que Jaehyun y Taeyong se habían ido, pero estaba equivocado.

-¡Ah! ¿Qué no podían ir a su nidito de amor? – exclamó apenas vio a la pareja desnuda en la cama.

Ambos se vistieron con rapidez.

-Doyoung – habló Jaehyun -Mi madre organizó una cena para hoy en la noche.

-¿Qué? Pero si no quiere ni verme en pintura.

-¿Seguro que estás bien? Estás más pálido que hace rato.

Doyoung comenzó a temblar, Taeyong no podía más con la tensión.

-Ayer… luego de ir a la clínica con tu madre, fui a un bar, bebí demasiado y estuve con alguien.

-Define estuve – exigió Jaehyun.

-Me acosté con esa persona, no usé protección y no recuerdo quién fue.

-Si tanto te asusta quedar embarazado, ¿por qué no tomas una pastilla y ya? – interrumpió Taeyong.

-Porque estoy en un tratamiento con hormonas, idiota.

-Estás estudiando medicina, ya debiste haber consultado con algún médico – comentó el mayor de los tres.

Taeyong necesitaba actuar normal, discutir con él como de costumbre, aunque por dentro estuviera muriendo de nervios.

-Ya basta, los dos – interrumpió Jaehyun -No es seguro que consulte aquí, mi madre tiene demasiados conocidos.

-Compraré algunas pruebas de embarazo y buscaré un médico para hacerme exámenes – dijo Doyoung.

-¿Quieres que te acompañe? – preguntó Jaehyun.

-No, estoy bien.

Doyoung le pidió a su chofer que le consiguiera dos pruebas de embarazo, luego tomó el directorio telefónico y llamó a la primera clínica que vio. Le agendaron una cita en dos semanas.







💥







-Negativo – exclamó Doyoung apenas ingresó a la habitación.

-¿Qué? – preguntó Taeyong.

-Las pruebas de embarazo dieron negativo y los exámenes que me hice también.

Taeyong cerró los ojos y lanzó un suspiro de alivio.

-Entonces, puedo continuar con mi vida normal – agregó Doyoung.

-Es decir, tirándote a media escuela.

-¿Tiene algo de malo? Mi estúpido marido se tira a un muerto de hambre y no me quejo – dijo para después salir de la habitación.

Taeyong notó que Doyoung había dejado los exámenes sobre su cama, los tomó y leyó lo que decían.

-Es un idiota – bufó, Doyoung había ido a una de las peores clínicas de la ciudad, la cual era conocida por dar malos diagnósticos. Además, no había dejado pasar el tiempo suficiente para saber si estaba embarazado; aquello sólo había logrado aumentar su angustia.






💥






[Semanas después]

Taeyong y Taeil almorzaban en la cafetería cuando se escuchó que algunas cosas se caían y luego Doyoung pasó corriendo en dirección al baño cubriéndose la boca con ambas manos.

-Si la vista no me engaña, Taeyong está preocupado – dijo el mayor.

El aludido le miró asustado.

-No es–

-Dime la verdad, ¿qué te pasa con Doyoung?

-Iré a tu habitación en la noche.

-¿Tan serio es?

Taeyong asintió. 

Luego de almorzar, Taeyong regresó a su habitación para encontrarse al chofer de Doyoung instalando un frigobar.

-Desconectaste mi lámpara y quitaste mi buró para ¿poner eso?

-La comida de esta escuela es horrible – contestó recostado en la cama.

-Listo, joven.

-Gracias, oye, tráeme los helados y las frituras que te pedí.

-Sí, como usted ordene.

El chofer se fue.

-¿Te quedarás ahí parado como estatua? – preguntó Doyoung mientras comía un poco de helado.

-No – contestó saliendo de su transe.

Aquellos vómitos, antojos y humor cambiante en Doyoung no eran normales. Algo andaba mal.



Continuará…