29 de marzo de 2019

Dynamite: Explosive - Capítulo 13



Capítulo 13: ¿Te arrepientes?


-M-mark debe saber esto – dijo Jeno entrando en pánico.

-No, la prueba puede estar defectuosa – Donghyuck trataba de tranquilizarse mentalmente.

-Compraré otra.

-No mal gastes tu dinero en—

Pero cuando Donghyuck se dio cuenta, Jeno ya había salido del departamento. 15 minutos después, ambos chicos se encontraban esperando el resultado de la segunda prueba.

-¿Qué no deberías estar en la escuela? – preguntó Donghyuck para calmar un poco el ambiente.

-Olvídalo, no puedo dejarte solo en una situación como esta – aclaró el mayor.

Donghyuck se sintió completamente conmovido por aquellas palabras.

-Gracias – murmuró.

La alarma que Jeno había puesto en su celular interrumpió aquel momento.

-Ya pasaron los 5 minutos – Jeno tomó la prueba entre sus manos.

-No quiero ver – exclamó Donghyuck cubriéndose los ojos con ambas manos -¿Qué dice?

El mayor tomó una bocanada de aire y echó un vistazo.

-Positivo.

-Voy a matar a Mark, está decidido – bufó molesto, saliendo del baño.

-¿Qué harás? Hablo enserio – preguntó Jeno.

Donghyuck suspiró con pesadez.

-Hablar con él, personalmente – contestó.

-No querrá abrirte la puerta de su casa, estoy seguro.

-¡Pues lo gritaré desde afuera para que toda su familia lo escuche! – caminó con paso firme hacia la puerta para salir del departamento.

Jeno lo detuvo tomándolo de la muñeca.

-No hagas nada estúpido, por favor – suplicó.

-Ya lo hice y mira qué consecuencias tuvo – se soltó de agarre de su amigo y partió hacia casa de Mark.

Durante todo el camino intentó localizar a Mark, pero este no contestaba sus llamadas; bajó del autobús y caminó hacia la casa del mayor, una vez que estuvo en la puerta, escribió un mensaje.



“Estoy afuera de tu casa. Es importante que hablemos.”


Leído.


“Sal ahora o juro que gritaré desde aquí.”


Leído.


“Repito, es importante.”


Markidiota: Ya voy.



Cerca de dos minutos después, Mark abrió la puerta.

-¿Qué quieres? – preguntó sin mucho ánimo.

-¿Qué le pasó al condón la última vez que estuvimos juntos? – preguntó el menor sin pena alguna.

Mark palideció y salió de su casa, cerrando la puerta, quedando solo con Donghyuck en el jardín.

-No sé de qué hablas.

-Dime la verdad, maldita sea – exigió Donghyuck.

-No le pasó nada, ¿por qué demonios estás tan insoportable?

-Por tu estúpida culpa.

-¿Y yo qué hice? – cuestionó Mark sumamente ofendido ante la acusación.

-Embarazarme.

Mark abrió los ojos enormemente.

-Donghyuck—

-Así es, Mark Lee, estoy embarazado y… muy molesto.

El aludido tenía la mente en blanco.

-Me hice dos pruebas y ambas marcaron positivo – agregó el menor.

-No te creo Рfue lo ̼nico que pudo articular Mark.

-Entonces vamos a una clínica para confirmarlo con pruebas irrefutables.

-Escucha – Mark le sostuvo fuertemente del antebrazo -No quieras manipularme con algo así sólo para sacarme más dinero.

-No estoy diciendo mentiras, pregúntale a Jeno si no me crees.

Mark soltó el brazo del chico y se quedó en silencio por casi un minuto, estresando aún más a Donghyuck.

-Vamos a la clínica ahora mismo, no quiero perder más tiempo – pausó -Pero si resulta ser mentira, te cobraré hasta el último centavo de la consulta – sentenció mirando con seriedad a Donghyuck.

Mark entró rápidamente a su casa por las llaves de su auto y tras decirle a Lucas que saldría un rato, partió con Donghyuck rumbo a la primera clínica que el buscador arrojó como resultado.








💞








Ambos chicos estaban sumamente nerviosos esperando a ser llamados por el médico.

-Lee Donghyuck – llamó la secretaria.

Tras haber contestado las preguntas pertinentes hechas por el médico, este prosiguió a realizar un ultrasonido.

-Efectivamente, hay embarazo – confirmó el profesional.

Mark sintió que el mundo se le venía encima.

-¿Cuánto tiempo tengo? – preguntó Donghyuck.

-Lo equivalente a dos meses.

Donghyuck comenzó a temblar.

-¿Qué opciones hay? – preguntó Mark tras estar un buen rato en silencio.

-La interrupción es ilegal en el país, si eso es a lo que te refieres – pausó -La mayoría de los jóvenes de su edad optan por la adopción.

El médico le entregó un folleto a Mark en el cual se explicaba detalladamente el proceso para dar en adopción.

-Platíquenlo con calma – dijo tras notar lo distantes que estaban ambos chicos.

Mark y Donghyuck salieron de la clínica y caminaron rumbo al estacionamiento; estaban en completo silencio, cada uno sumergido en sus propios pensamientos. Tras ingresar al auto del mayor, este decidió que era momento de hablar sobre el tema.

-Creo que lo mejor es—

-Quiero tenerlo – interrumpió Donghyuck.

-¿Qué? – exclamó Mark.

Donghyuck miró fijamente al otro.

-Quiero quedármelo – corrigió con voz firme.

-¿Tienes idea de lo que estás diciendo? No seas inmaduro – bufó Mark.

-Sabía que no tomarías ninguna responsabilidad, eres un cobarde.

-Donghyuck—

-Todo esto es tu maldita culpa, no debí haber dejado que me manipularas.

-No, no todo fue mi culpa. Aceptaste enredarte conmigo.

-¡Porque necesitaba el dinero y tú lo sabías perfectamente!

-Dinero fácil.

Donghyuck se sintió ofendido y le dio una sonora cachetada.

-¿Qué le pasó al condón la última vez que estuvimos juntos? – preguntó.

Mark le miró molesto mientras se sobaba la mejilla.

-Se rompió – contestó.

El moreno estuvo a punto de darle otra cachetada, pero Mark le sostuvo de la muñeca a tiempo.

-¡¿Por qué mierda no me dijiste?! – gritó sumamente alterado.

-N-no sé, todo pasó muy rápido.

-Eres despreciable – Donghyuck se soltó del agarre de Mark.

-¿A dónde vas? – cuestionó tras ver que Donghyuck salía del auto.

-No quiero verte.

-¿Qué piensas hacer?

-Ya sabes mi respuesta – cerró la puerta del auto con fuerza.

Mark suspiró cansado.

-Deja que hable con mis papás.

Donghyuck chasqueó la lengua sin creer en las palabras de Mark.

-Eres demasiado cobarde como para hacerlo – le enseñó el dedo de en medio y se fue caminando a paso firme hacia la calle.

Mark no hizo nada por detenerlo; Donghyuck tenía razón, el que con más culpa cargaba era él por haberle manipulado de aquella manera.









💞









Donghyuck acababa de llegar al departamento, estaba hecho una fiera, algo que no pasó desapercibido por Jeno, quien estaba en la cocina preparándose de comer.

-¿Qué pasó? – preguntó al moreno.

-¿Sigues aquí? – exclamó Donghyuck tras ver a su amigo ahí.

-Te dije que no iría a clase – contestó -Y… supongo que no te fue bien.

Donghyuck negó con la cabeza.

-Lo odio - bufó -Fuimos a una clínica para comprobar mis palabras y cuando el doctor confirmó el embarazo, Mark preguntó acerca de las opciones y estoy seguro que quiere la adopción.

-¿Y tú no?

-Claro que no, quiero quedármelo.

Jeno salió de la cocina y envolvió en un abrazo a su amigo, el cual rompió el llanto.

-No debería de estar consolándote porque ignoraste mis advertencias.

Donghyuck rompió el abrazo con brusquedad.

-No puedo creer que sigas culpándome – reclamó el moreno.

-No, sé lo que Mark hizo, hablamos hace un rato – explicó -Jamás imaginé algo así de él, estoy muy decepcionado.

-¿Te dijo que me ocultó lo del condón roto?

Jeno asintió.


-Quiero matarlo, pero no quiero ir a la cárcel – exclamó molesto Donghyuck.
-Ya, ya, luego planeas el asesinato perfecto, ve a darte un baño que apestas a hospital.

Donghyuck obedeció de mala gana, Jeno regresó a la cocina y mientras terminaba de preparar sus alimentos, recordó las palabras de su amigo.



|Flashback|


-¿Jeno?


-Hola, Mark.


-Ah… quería saber si Donghyuck ya llegó al departamento.


-No, ¿por qué?


-Discutimos y se fue solo – se limitó a contestar el mayor.


-Pues no ha llegado pero no debe tardar en hacerlo.


-E-está bien.


-Mark.


-Dime.


-Ya lo sabes, ¿no?


-Sí.


-Donghyuck dice que todo es culpa tuya, pero no—


-Lo es, bueno, gran parte – pausó -Sabía que necesitaba dinero y yo… algo me pasaba con él en esos momentos, así que le propuse ser amigos con beneficios. Fue muy claro conmigo acerca de que podía embarazarse pero aun así insistí. Soy un imbécil.


-¿Y la protección?


-Casi siempre hubo, pero la vez que nos descubriste, el condón se rompió, me asusté tanto que no le dije; el tiempo pasó, regresé con Wendy y me olvidé de eso.


-No puedo creerlo, no eres el Mark que conozco.


-No sé en qué estaba pensando cuando fui esa noche a tu departamento.


-Odiabas a Donghyuck, no me explico cómo—


-Escucha – Mark suspiró -Odiaba el hecho de que cada vez que lo tenía cerca alteraba mi paz y… mis emociones. Nunca me había pasado algo así, pensé que sólo sentía atracción por él y que teniendo sexo se arreglaría, pero todo se ha complicado.


-¿Te arrepientes?


-No.


-Entonces hazte responsable.


Mark quedó en silencio.


-Donghyuck acaba de llegar y puedo escuchar que está muy molesto.


-Lo sé.


-Luego hablamos, adiós – cortó la llamada.


|Fin del flashback|



Mark llevaba minutos mirando el número de su novia; no se sentía listo para decirle, pero sabía que debía hacerlo para no empeorar las cosas.

Presionó “llamar”.


Continuará…

21 de marzo de 2019

Dynamite: Explosive - Capítulo 12



Capítulo 12: Consecuencias


[Un mes después]

Donghyuck y Mark no habían vuelto a verse, Jeno prefería ir a casa de su amigo para evitar que ambos chicos se encontraran. Mark y Wendy habían regresado y su relación se estaba bastante estable a pesar de la distancia.

-La próxima semana viajaré a Canadá – comentó Mark a Jeno, quien había ido a visitarlo.

-¿Cuánto tiempo te quedarás?

-Dos semanas, Wendy saldrá de vacaciones.

-Me alegro por ustedes – sonrió -Wendy es perfecta para ti.

-Lo sé – suspiró Mark sonriente.

Un extraño, pero incómodo silencio hizo presencia.

-Gracias por no haberle dicho nada a nadie – murmuró Mark.

Jeno entendió a lo que su amigo se refería.

-Sólo quiero lo mejor para ambos – comentó.

Mark notó que el ambiente se estaba arruinando, así que decidió invitar a su amigo a cenar.








💞








Donghyuck había regresado de trabajar. Llevaba dos semanas laborando en una nueva cafetería cercana al condominio por lo que no tenía que gastar extra en pasajes, pero seguía sin ahorrar el dinero suficiente para regresar con su familia; no porque no podía sino porque no quería hacerlo.

-Estoy tan cansado – suspiró, recostándose en su cama mirando hacia el techo. Llevaba una semana con mareos los cuales quería justificar con lo exhausto que se sentía últimamente debido, según él, a su trabajo.

Luego de jugar videojuegos en la computadora, fue a la cocina por algo de comer; se hizo una sopa instantánea y mientras esperaba a que esta estuviera lista, Jeno llegó.

-¿A dónde fuiste? – preguntó Donghyuck.

-Con un amigo – contestó Jeno.

-Sólo di que fuiste a casa de Mark, no hay problema – bufó el moreno.

Jeno asintió y entró a su habitación pues si seguía ahí, el menor continuaría haciendo preguntas acerca de Mark. Donghyuck terminó de preparar la sopa e ingresó a su habitación para continuar jugando, pero no pudo acabarse la comida como usualmente lo hacía ya que perdió el apetito repentinamente.

-¿Necesitaré vitaminas? – se preguntó a sí mismo, observando el tazón casi lleno.

Salió de su habitación e ingresó a la de Jeno sin tocar previamente, el mayor acababa de darse un baño.

-¿Qué quieres? – preguntó Jeno mientras se vestía.

-¿Cómo me has visto últimamente?

El mayor arqueó una ceja.

-Es que… creo que necesito vitaminas.

-No te automediques, mejor ve a ver a un médico.

-No – bufó -Responde a mi pregunta.

-Casi no te he visto, ambos estamos ocupados.

-Bueno, te diré cómo me he sentido y luego me das una opinión.

-Donghyuck, estoy cansado.

-Pero—

-Haz lo que quieras, después de todo nunca escuchas lo que te digo.

-¿Sigues con ese tema? Ya aclaré que no fui yo quien buscó a Mark para ser amigos con beneficios, tampoco le pedí dinero a cambio; todo fue idea suya, ¿acaso le has preguntado?

-No – contestó -Regresa a tu habitación, quiero descansar.

Donghyuck rodó los ojos y obedeció. Su amistad con Jeno había sido lastimada luego de haber sido descubierto; no importaba cuántas veces le explicara que Mark era quien había comenzado todo, siempre le creería más a su mejor amigo que a él.







💞








Las semanas fueron transcurriendo, Jeno y Donghyuck se hablaban un poco más, pero no como antes. Una tarde, mientras Donghyuck limpiaba el departamento y Jeno hacía su tarea en el comedor, el moreno tuvo que sentarse repentinamente, llamando la atención del mayor.

-¿Qué te pasa? – preguntó Jeno.

-Llevo semanas con mareos, las vitaminas no me ayudaron en nada – se quejó -¿Crees que esté enfermo?

Jeno tragó fuerte.

-¿S-sólo tienes mareos?

Donghyuck negó con la cabeza.

-Igual mucho sueño, ¿estaré anímico?

-Ve a ver a un médico, lo digo enserio – aquella había sonado más a una orden.

-No quiero, cuesta mucho.

-¿Entonces cómo vas a saber qué tienes?

-Lo voy a pensar – se puso de pie y continuó limpiando.

Jeno le observó por un par de minutos, no quería pensar demasiado las cosas, pero tenía miedo de que lo que pensaba fuera verdad.

Ese mismo día, ambos pidieron algo para cenar.

-¿Por qué no comes? Es tu platillo favorito – dijo Jeno, Donghyuck llevaba un buen rato jugando con la comida.

-No tengo mucha hambre.

-Pero si hace un rato dijiste que tenías tanta hambre que te comerías una vaca.

-No sé, de repente ya no me dieron ganas de comer.

Jeno rodó los ojos y tomó con sus palillos un trozo de carne.

-Abre la boca.

-No quiero.

-No te estoy preguntando.

Donghyuck apretó los ojos y abrió la boca, apenas sintió el sabor, las arcadas hicieron presencia. Jeno entró pánico así que fue a la cocina por un vaso con agua, el menor lo bebió en segundos.

-Lo siento – se disculpó apenas Donghyuck estuvo más tranquilo.

-Creo que sí estoy enfermo – murmuró en voz baja.

-Ve a recostarte, yo me encargo de recoger todo.

Donghyuck asintió y fue a su habitación. Una vez que estuvo acostado en su cama, llevó ambas manos a su vientre; tenía miedo… mucho miedo.

Mientras Jeno lavaba los trastes, su mente comenzó a atar cabos. Donghyuck llevaba quejándose de malestares desde que lo descubrió con Mark; tenía mareos, cansancio y ahora náuseas y además llevaba algunas semanas sin beber alcohol.

-No, Jeno, no mal pienses – se dijo a sí mismo; sin embargo, terminó yendo a la farmacia.








💞







[Al día siguiente]

Donghyuck jugaba videojuegos para aprovechar su día de descanso cuando Jeno ingresó a su habitación.

-Hey, ¿por qué no estás en la escuela? – preguntó a su amigo.

-Cancelaron los dos primeros módulos – pausó -¿Cuánto tiempo llevas ahí? ¿Ya comiste algo?

-No, no tengo hambre.

Jeno tomó aire y lanzó una bolsa sobre la cama, en la cual Donghyuck se encontraba.

-¿Qué es eso? – preguntó el moreno.

-Una prueba de embarazo.

El menor le miró confundido.

-Para ti – agregó Jeno.

-Estás loco, no estoy—

-No necesito ser médico para darme cuenta, Donghyuck.

-No sé de qué hablas – bufó y regresó a su videojuego.

-Bien, continúa así y cuando sea demasiado tarde, no vengas a llorarme – dijo con molestia y abandonó la habitación dejando la prueba sobre el escritorio.

Donghyuck puso pausa a su juego y observó la bolsa durante algunos minutos, luego se llevó una mano al vientre.

-Ojalá te equivoques, Jeno – exclamó para después salir de la cama, tomar la prueba y meterse al baño.








💞








Jeno estaba por salir del departamento para tomar el autobús que le llevaría a la universidad cuando escuchó un grito proveniente de la habitación de Donghyuck; rápidamente fue a ver de qué se trataba.

-¿Qué pasa? ¿Estás bien? – preguntó a su amigo.

-Lo voy a cortar en pedazos y luego disolveré su cuerpo – exclamó.

Jeno le arrebató la prueba de embarazo.

-Oh, demonios.

-Maldito seas, Mark Lee.

Tal como Jeno sospechaba, Donghyuck estaba embarazado.


Continuará…

14 de marzo de 2019

Dynamite: Explosive - Capítulo 11



Capítulo 11: … Ni cosas malas que parezcan buenas


Una semana había pasado desde la última vez que Mark y Donghyuck se habían visto, este último comenzaba a desesperarse pues el dinero se le estaba terminando y no encontraba trabajo, además de que Mark no contestaba sus llamadas ni mensajes.



-¿Qué quieres? – al fin Mark había contestado la llamada.


-Se me termina el dinero.


-¿Y eso a mí qué?


-Mierda, ya regresó el insoportable Mark – bufó el moreno.


-¿Quieres dinero?


-¡Obvio! No encuentro trabajo – pausó -Además necesitamos aclarar la situación entre nosotros.


-¿Estás en el departamento?


-Sí, Jeno no está.


-Perfecto. Estaré ahí en media hora – cortó.



Donghyuck se quedó mirando la pantalla del celular; estaba molesto y no sabía si era por el cambio de actitud de Mark o por el inminente fin del negocio que tenían.








💞








[Una hora después]

-Regresaré con ella – confesó Mark -Se lo diré mañana domingo antes de su vuelo.

-Lo sabía – bufó el moreno -Pasaría tarde o temprano.

-Hey, no hables como si hubiéramos tenido una relación.

-Claro que no, ¿quién en su sano juicio querría eso contigo?

Mark suspiró y se acercó al moreno, rodeando su cintura con ambos brazos.

-Quiero hacerlo una última vez – susurró en su oído.

Donghyuck puso resistencia y comenzó a apartarlo de su cuerpo.

-Necesitas el dinero – agregó Mark, mordiéndole la oreja -Y yo te necesito.

El pulso del menor se aceleró con aquellas palabras pero no desistía, desesperando a Mark.

-Todo tuyo – exclamó tras sacar un fajo de billetes de una de las bolsas de la chaqueta de cuero que traía puesta.

Donghyuck tomó el fajo entre sus manos y contó los billetes. Suspiró.

-Debes estar muy desesperado como para darme tanto dinero – el moreno recargó ambos brazos en los hombros de Mark.

-Necesitaba convencerte.

Donghyuck sonrió y lo besó, Mark intensificó el beso; subió al menor a la mesa del comedor, retirándole la camisa con brusquedad.

-E-espera… no quiero venirme… aquí— ah – Donghyuck detuvo los movimientos de la mano que Mark tenía dentro de su pantalón, la cual estaba estimulando su miembro.

Mark entendió y ambos se dirigieron a la habitación del menor mientras terminaban de quitarse la ropa en el camino. Entre besos, cayeron a la cama.

Donghyuck se giró, dándole la espalda al mayor, el cual le levantó la cadera, tomó algo de lubricante e introdujo dos dedos de una sola vez.

-Está frío – gimió Donghyuck.

-Nada de quejas – regañó Mark, insertando otro dígito, causando que el cuerpo de  Donghyuck se contrajera.

Mark retiró sus dedos y detuvo todas sus acciones repentinamente.

-¿Qué? ¿Ya te arrepentiste? – reclamó Donghyuck.

-No, necesito un condón – Mark bajó de la cama y buscó entre sus ropas; estaba seguro de conservar el que le dieron en una feria de la sexualidad en la universidad -Hace mucho que lo tengo… - murmuró para sí mismo, dudando entre usarlo o no.

-¿Encontraste alguno? – preguntó el moreno.

-Sí, pero sólo podremos hacerlo una vez – mostró el empaque al menor.

-Pues que valga la pena – Donghyuck palmeó un costado de la cama, invitando a Mark a continuar con el momento.

El mayor sonrió de oreja y oreja, abrió el condón y regresó a la cama.

-No, quiero verte – ordenó tras darse cuenta que Donghyuck tenía intenciones de regresar a la posición anterior.

-Eres un cerdo – bufó Donghyuck, abriendo las piernas para que Mark se acomodara entre ellas.

-Nunca voy a arrepentirme de lo que hice contigo – dicho esto, comenzó a introducirse en el cuerpo del otro.

Donghyuck echó la cabeza hacia atrás y apretó con fuerza las sábanas debajo de su cuerpo.

-Mírame – ordenó el mayor, Donghyuck hizo caso y ambos se sumieron en un hambriento beso que casi ocasiona que el menor se viniera.

Mark comenzó a moverse, provocando los sonoros gemidos que tanto adoraba escuchar de Donghyuck, quien enterraba las uñas en la espalda del otro pues quería que Wendy supiera que alguien había estado ahí en su ausencia y Mark deseaba que el menor no olvidara aquellos intensos momentos y las emociones provocadas por ellos.

-Mark… voy a terminar – avisó el menor.

-Ah… yo también – deslizó una mano hacia el miembro de Donghyuck, masturbándolo hasta que el orgasmo se adueñó de sus cuerpos, culminando con aquel placentero momento.

Mientras Donghyuck limpiaba su vientre, Mark fue al baño para retirarse el condón; sintió cómo la presión se le bajó tras notar que este estaba roto.

-Mierda – exclamó para sí mismo.

-¿Qué? – preguntó Donghyuck quien recién había ingresado al baño.

-Nada – respondió, tirando con rapidez el condón a la basura.

-¿Te irás sin bañar? – cuestionó Donghyuck al ver que Mark comenzaba a vestirse con algo de prisa.

-Sí – se limitó a contestar; su mente estaba hecha un desastre.

Donghyuck no le dio importancia a la actitud de Mark pues ya se había acostumbrado a sus repentinos cambios de humor.








💞








Jeno acababa de llegar al departamento luego de un largo y cansado día; lo único que quería era comer algo, darse un baño y dormir. Mientras se retiraba los zapatos, notó ropa en el suelo y en la mesa del comedor.

-Siempre dejando ropa— Mark tiene una camisa así – exclamó mientras analizaba aquella prenda, su vista se dirigió a la mesa, en la cual había un fajo de billetes, unas galletas a medio comer y latas de gaseosas abiertas.

En eso, la puerta de la habitación de Donghyuck se abrió, Jeno giró el cuerpo y estuvo a punto del desmayo cuando vio que Mark y el moreno salían de ahí.

-¡Jeno! – dijeron ambos chicos en unísono.

-Necesitamos hablar – sentenció el aludido.

Los descubiertos se sentaron en las únicas dos sillas que había en el comedor mientras Jeno caminaba de un lado a otro.

-¿Qué es lo que hay entre ustedes? – preguntó.

-Amigos con beneficios, bueno… ex amigos – respondió Donghyuck.

-¡No puedo creerlo! Mark, acabas de terminar con Wendy, tu novia de años y ya te estás acostando con… ¡¿Ã©l?! Y tú – Jeno señaló a Donghyuck -¿Qué demonios te pasa? ¿Acaso le cobrabas por sexo?

-¡¿Qué?! ¿Por qué me culpas a mí? – reclamó Donghyuck.

Mark no podía dejar de pensar en el condón roto, los regaños de Jeno parecían ruidos de fondo.

-No te preocupes – se levantó de la silla, interrumpiendo la discusión entre Donghyuck y Jeno -Ya no nos seguiremos viendo – tomó su chaqueta y salió del departamento, dejando perplejos a los otros dos chicos.

-Regresará con Wendy – agregó Donghyuck, tomando el fajo de billetes antes de que Jeno lo decomisara y le pidiera regresarlo.

-¡¿Qué tienes en la cabeza?! ¿No te da miedo quedar—

-Usamos condón todas las veces, tranquilo – interrumpió el moreno -Además ya lo escuchaste, se acabó – bufó molesto para después ponerse de pie y regresar a su habitación.

Jeno suspiró y recordó aquella conversación que había tenido con Wendy.


|Flashback|

-Necesito que me ayudes a terminar lo que sea que tiene con Donghyuck – pidió Wendy.

-¿Qué? No hay nada entre ellos - Jeno negó rápidamente lo dicho por la joven.

-¿No te parece raro que tan pronto Mark y yo terminamos y Donghyuck terminó con Hwall, ambos se hicieron amigos de un día para otro?

Jeno no sabía qué decir, estaba sorprendido de que la chica tuviera las mismas sospechas que él, pero no quería hablar de más y causar caos, puesto que pensaba que todo era solamente paranoia suya.

-Pero eso no significa que tengan algo, sabes que se odian – contestó.

-Donghyuck nunca se me hizo de fiar – pausó la joven -Algo me dice que está manipulando a Mark.

|Fin del flashback|


-Espero que su aventura no tenga consecuencias – murmuró Jeno para sí mismo.



Continuará…