Rivalidad - Cap. 13

Capítulo 13: Nuevo hogar


= Confía en mí – contestó

Key hizo caso a las palabras de Minho y dejo que éste continuara con su trabajo

Minho tuvo que idearse millones de formas para no lastimarlo, si bien, él había comenzado con esto y era su responsabilidad cuidar de Kibum y de su hijo.

La habitación parecía un horno; caliente hasta más no poder, pero esto poco les importaba. Se estaban entregando a la pasión.


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No quería sonar suplicante, pero la ocasión lo ameritaba.

Necesitaba apagar esas ganas por sentir el calor del cuerpo ajeno. No se explicaba qué era lo que le hacía desear tanto a Minho.

Tal vez era la forma en la que lo besaba, en la que lo tocaba, en la que le hablaba.

Sintió aquella intromisión en su cuerpo y al poco tiempo esa fricción
enloquecedora.

Desesperado, buscó los labios del más alto…

= Minho~ - suspiró

= ¿Qué?

= ¿Por qué no dejas que te bese? – preguntó

= Hmm…porque no me lo pides

= Ahh…no seas malo~ - ¡Rayos! Había sonado suplicante, lo que menos quería

= Me encanta cuando suenas así – lo besó gustoso

Comenzó a moverse con más fuerza, pero siempre con cuidado, le daba terror que lo que estaban haciendo lastimara al bebé.

Sintió que Kibum clavaba las uñas en su espalda, pensó que había hecho algo mal, pero, todo lo contrario, lo estaba disfrutando.

Al poco tiempo llegaron al orgasmo.

Una vez que tranquilaron sus respiraciones, Key se acomodó en el pecho del muchacho.

= Nunca imaginé sentir más de esta forma – confesó

Minho sabía la razón: las hormonas

= ¿Te lastimé? – preguntó

= Nop

= Ya ves…solo tenías que confiar en mí

Y al poco rato cayeron dormidos


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A la mañana siguiente Minho, como siempre, fue el primero en despertar. Se aterrorizó al ver la hora 10:00 am. Había perdido dos horas de clase.

Con mucho cuidado se levantó de la cama para no despertar a Key, pero, no funcionó.

= Mmm~ - suspiró aún con los ojos cerrados, mientras se removía en la cama

= ¿Qué hora es?

= Diez de la mañana

= ¿No deberías estar en clases? – se sentó

= Se supone… - comenzó a vestirse

= Minho, no debes faltar

= Ya sé~, ya sé

= Dios…que hambre tengo – murmuró mientras acariciaba su barriga

= ¿Quieres algo?

= No, gracias, mejor vete a la escuela

= Está bien – lo tomó de los hombros = Piensa en lo que te dije

= Sí

Y era verdad, aún tenían problemas por resolver


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Heechul fue a visitar a su amigo y a su futuro sobrino.

= ¿Está bien que me vaya a vivir con él? – preguntó algo preocupado

= Yo digo que sí – hizo una pausa = Es cierto que no se aman, pero algo
debe de haber por ahí para que se hayan acostado dos veces

= Cofcoftrescofcof

= ¡¿QUÉ?! – pegó un grito

= Emm…sí ayer pasó algo~ - sus mejillas rápidamente adquirieron ese rubor = Pero tienes razón ¿Qué tan malo puede ser vivir con él? – no sabía en lo que se estaba metiendo

= ¡Exacto! ¿Entonces…?

= Voy a vivir con él, pero, esto solo lo hago por mi baby – aclaró

= Ya lo sé

Ahora tenía que hablar con Minho para comenzar a pasar sus cosas a su nuevo “hogar”.

Al otro día, antes de salir al descanso, Heechul se acercó a Minho…

= ¡Tú! Me dijo Key que va a vivir contigo

= Sí…¿y?

= Ash, es obvio que va a necesitar que alguien lo ayude con sus cosas

= ¿Y por qué no lo haces tú? Eres su amigo ¿no?

= ¡Sí! ¡Pero yo no lo embaracé! – exclamó irritado

= ¡Baja la voz! ¡No quiero que nadie lo sepa!

= Acaso…¿te da vergüenza?

= ¡Sí!

= Eres un reverendo idiota. Pobre de mí diva, lo que le espera contigo – hizo una pausa = Pero eso sí… - lo tomó bruscamente de la camisa, Minho se sorprendió, nunca pensó que Heechul tuviera su lado “macho” = Ni se te vaya a ocurrir hacerle daño a mi sobrino porque ¡Te mato Choi Minho! Haré que tu muerte sea lenta y dolorosa

Minho podía jurar que sentía miedo con cada palabra que Heechul decía

= ¿Entendiste? – apretó el agarre en la camisa = ¡¿ENTENDISTE?!

= Sí, sí, tranquilo – se soltó

= Bien – se dio la media vuelta y se fue a la oficina de Siwon

= Argg…sí que da miedo – se arregló el uniforme; en parte Heechul tenía razón, Key estaba haciendo un esfuerzo por vivir con él a pesar de no
llevarse bien, lo menos que podía hacer era ayudarlo a mudarse

Al salir de clases fue al departamento de Key…

= Vine a ayudarte – dijo entre dientes

= Gracias – cortó

Y el montón de maletas comenzó a desfilar de la puerta a su auto

= ¿Por qué tienes tanta ropa? Ni si quiera te la puedes poner así como estás

= Bobo, es un estado pasajero, voy a recuperar mi figura

= Sí, como no, te vas a quedar de flojo en la casa

= ¡Claro que no! Voy a volver a la escuela, por TU culpa tuve que salirme

= ¿Mi culpa? Fue la tuya

= Yo no me embaracé solito, no soy iguana

= ¡Ya! Fue culpa de ambos ¿Feliz?

= Sí, porque lo aceptaste

El auto de Minho estaba que rebosaba de tantas cosas

= Ya súbete, todavía faltan las mías – dijo Minho

= Ya voy, señor, ya voy – y con algo de trabajo se subió

Minho ni si quiera tuvo la iniciativa de ayudarle. Cuando llegaron, el más alto le preguntó a un encargado…

= Disculpe, ¿puede ayudarnos a subir estas maletas a la habitación 137?

= Sí – contestó el muchacho

Key caminaba atrás tratando de ocultar su estado. Había un calor horrible y él se mantenía tapado en extremo.

El muchacho terminó con su trabajo…

= Gracias – dijo Minho y le dio un algo de dinero

Kibum se tiró en el piso, aún no había muebles ¿qué clase de comodidad era esa?

= ¿Qué te pasa? – preguntó Minho

= Estoy mareado – se recostó = Y no hay muebles

= En mi casa solo tengo dos, el de la sala y el puff. En la tuya hay más

= ¿Piensas traer los míos?

= Sí…Key…estás muy pálido – comenzó a preocuparse

= No pasa nada~ - sentía como si los párpados le pesaran

= ¿Key? – se acercó = ¿Key?

El nombrado giró la cabeza. Demasiado cerca. Minho posó su mano sobre la frente del muchacho.

= Estás caliente

= Oh…¿de verdad?...quiero un dulce – Key empezaba a delirar

Minho sabía que eso estaba mal; algo no andaba bien. Era peligroso que Kibum se enfermara en ese estado, todo podía repercutir en el bebé.

= ¿Quieres ir con la doctora? – preguntó

= No~

= Key… - Minho estaba rompiendo la distancia. Estaba a tan solo unos cuantos milímetros de su boca, Kibum parecía perdido, tenía los ojos entreabiertos = “Minho si vas a hacerlo, que sea de una vez, que crea que fue parte de su delirio” – pensó

Y así fue; juntó sus labios, de una manera no tan inocente. Se estaba aprovechando de la situación. Con su lengua se abrió paso en aquella húmeda cavidad, Key suspiraba continuamente haciendo de aquello una escena
excitante.

El oxígeno comenzó a hacerle falta, supuso que a Kibum también. Lentamente se fue separando del chico.

= Llamaré a la doctora – se levantó y tomó su celular

Luego de hacer una cita urgente, dirigió su mirada a Key quien yacía dormido. Su mirada parecía reflejar dolor.

= ¿Qué le dolerá? – preguntó a la nada


Continuará...