Dynamite: Explosive - Capítulo 7

Capítulo 7: Explosión

Luego de aquella interesante investigación, Mark salió de su habitación y se dirigió a la cocina por algo para comer.

-Mark – la voz de Doyoung hizo que casi dejara caer el tazón con fresas que traía en las manos.

-¿Ya regresaste? – preguntó como si nada.

-¿Por qué no me dijiste que terminaste con Wendy? – reclamó su padre.

-P-porque—

-¿Qué tienes Mark? Wendy dice que hay alguien más, ¿es eso cierto?

-Claro que no.

Doyoung se acercó a su hijo.

-Te conozco bien, dime la verdad – pidió.

Mark apartó la mirada.

-No hay nadie más, papá.

Doyoung soltó un suspiro y asintió.

-Espero que no te arrepientas de la decisión que hayas tomado.

El menor sintió un escalofrío recorrer su espalda.

💞

[Días después]

El día había llegado, aquella tarde de finales de invierno, ambos comenzarían con su “inocente” juego.

-¿Qué no pudiste al menos pasar la escoba? – exclamó Mark tras ver lo desordenada que se encontraba la habitación del moreno; había ropa, recipientes vacíos de comida, envolturas con snacks a medio comer, entre otras cosas que el mayor no quería averiguar qué eran.

-¿Ibas a pagarme por hacerlo? – cuestionó Donghyuck.

-No, es algo que DEBES hacer – recalcó el mayor.

Donghyuck rodó los ojos, algo que sacaba de quicio a Mark.

-Entonces… ¿hiciste lo que te dije? – preguntó Mark luego de un incómodo silencio.

-¿Limpiarme? Sí, obviamente.

-¿Es tu primera vez? – el pulso de Mark se aceleró tras la expectativa que la respuesta le provocaba.

-Claro que no, ¿crees que soy tan idiota como para perder mi virginidad contigo? – bufó el moreno.

Mark asintió.

-¿Fue con Hwall? – preguntó el mayor.

-No, fue con alguien de la preparatoria.

-¿Fueron novios?

Donghyuck le miró con el ceño fruncido.

-¿Qué hay de ti? ¿Es tu primera vez con un hombre? – contraatacó.

Mark palideció ante la pregunta; claro que era su primera vez con un chico, la única persona con la que había estado en toda su vida era Wendy.

-Ponte de rodillas.

Aquella orden descolocó a Donghyuck.

-¿Qué? Fui muy claro cuando dije que nada fetiches y cosas sado – se quejó el moreno.

-Hazlo Donghyuck, no tengo todo tu tiempo, además, voy a pagarte.

-¿Y? No por eso voy a ser tu put—

Mark jaló de la camisa a Donghyuck y lo besó profundamente, dejándolo sin aire. Cuando se separó, sintió una punzada en su entrepierna tras verlo sonrojado.

-No voy a hacer nada que no te guste – le dijo al oído.

El menor le miró por algunos segundos para después ponerse de rodillas. Mark tomó aire y puso ambas manos en el primer botón de su pantalón.

-Con que eso es lo que quieres – murmuró Donghyuck, con una enorme sonrisa dibujada en su rostro -Deberías aprender a pedir las cosas – bufó, acercándose al mayor para ayudarlo a desabrocharse el pantalón.

Mark se había sentado en la cama, ya que aquella posición le resultaba cómoda cuando Wendy lo hacía. Se dejó llevar por imágenes mentales de su primera vez con la chica y la sensación de la suave boca de Donghyuck envolviendo su miembro, aumentando el ritmo de sus embestidas en la boca del otro, el cual sentía que se asfixiaría en cualquier momento.

-Eres un cerdo – se quejó Donghyuck mientras tosía y se limpiaba la boca debido a que el mayor se había venido sin avisar.

Mark le observaba agitado, el cuerpo del menor comenzaba a reaccionar pues el bulto en su pantalón era bastante notorio.

-Estaba recordando algo – justificó el mayor, tomando de la muñeca a Donghyuck para después recostarlo en la cama.

-Ni se te ocurra decir el nombre de tu ex, ¿quedó claro? – advirtió el moreno.

El mayor asintió con una sonrisa y lo besó.

La temperatura corporal de ambos había aumentado, sus ropas se encontraban en el suelo y algunas en la cama. Mark se había documentado en el tema, pero no podía negar que se encontraba bastante nervioso, pues estaba seguro de que Donghyuck sólo esperaba a que  cometiera el mínimo error para reclamarle.

-Prepárate – ordenó al menor, se quería ver “rudo” pero en realidad tenía miedo de hacer las cosas mal y lastimarlo.

-¿Qué?

-Quiero verlo.

-Demonios, de haber sabido qué yo haría todo el trabajo… - murmuró Donghyuck para sí mismo, acomodándose mejor para comenzar a hacer lo que el mayor le había pedido.

Mark observaba la manera en la Donghyuck metía y sacaba los dedos de su interior; no parecía estar avergonzado haciendo aquello ante alguien que llevaba poco tiempo de conocer.

-Estoy listo – jadeó Donghyuck.

El mayor asintió y tragó fuerte; se recostó lentamente sobre el moreno, levantó un poco sus caderas y suspiró para después comenzar a adentrarse en el otro una vez que se había colocado el condón. Una cálida y placentera sensación envolvió su miembro; agradecía haber comprado aquellos costosos condones con sensación al natural.

Donghyuck lo atrajo a sus labios, provocando que Mark perdiera la concentración.

-Dong—

-Termina de entrar – pidió el moreno.

Mark obedeció y una vez que estuvo completamente dentro del menor, ambos se miraron directamente a los ojos.

-V-voy a moverme – dijo Mark a lo que Donghyuck asintió.

Mark movía sus caderas con frenesí, haciendo que la cabecera de la cama chocara contra la pared. Por suerte Jeno no estaba, si no ya habrían sido descubiertos.

-Mhn… Mark—ah… espera – gemía Donghyuck enterrando las uñas en la espalda del mayor.

-¿Estás bien? – preguntó Mark en un jadeo.

-N-no te detengas… hmn.

Los gemidos se escuchaban por toda la habitación, Mark trataba de controlar los suyos, pero las sensaciones eran tan nuevas y placenteras para él, que le resultaba imposible hacerlo.

El menor hizo la cabeza hacia atrás, terminando entre sus cuerpos. En cualquier otro contexto, Mark se hubiera sentido asqueado por algo así, pero se trataba de Donghyuck y el saber que él había sido el causante de aquello, le llenaba de orgullo y excitación.

Depositó las piernas del moreno sobre sus hombros, arremetiendo con más velocidad para terminar mientras guardaba en su memoria las expresiones de placer del otro. Cayó exhausto sobre el cuerpo del menor y nuevamente, los recuerdos con su novia asaltaron su cabeza, haciendo que se separara en menos de un segundo.

-¿Qué? ¿Te dio asco mi pecho plano? – cuestionó Donghyuck.

Mark prefirió ignorarlo y comenzar a vestirse.

-Aquí está el dinero – dijo tras un sepulcral silencio en el que sólo los sonidos propios de la ciudad y él vistiéndose, se escuchaban.

-¡¿Sólo esto?! – exclamó el menor.

Mark levantó una ceja sin comprender.

-¿No me pagarás más por el blowjob? Tuve que tragármelo sino iba a ahogarme y a morir – dramatizó.

-No te pagaré más – dijo con voz firme el mayor.

-¿Es en serio? Prime me obligas a ser tu amigo con beneficios, luego a hacerte una mamada y—

Mark lo había tomado fuertemente de la barbilla.

-Deja de quejarte, me hartas – dicho esto, lo besó intensamente, asegurándose de saborear con su lengua la cavidad del menor.

 -Ni creas que vas a callarme así – atacó el moreno.

El mayor sonrió con cinismo.

-Vete a la mierda, Mark Lee – gritó Donghyuck mientras el mayor caminaba hacia la salida de la habitación.

-Esa no es manera de tratar a la persona que tiene información delicada sobre ti – dijo.

Donghyuck rodó los ojos.

-Por cierto, sí.

-¿Sí, qué?

-Sí fue mi primera vez con un chico – una vez que dijo esto, cerró la puerta y salió huyendo del departamento.

Apenas ingresó a su auto, comenzó a reír solo, cualquiera pensaría que estaba demente, pero no, se encontraba hecho un manojo de emociones. De ahora en adelante, él sería quien sacaría de quicio a Donghyuck.

Continuará…